La diputada nacional Silvia Vázquez presentó un proyecto de ley en que solicita que «la práctica del fútbol sea declarada de de interés nacional» y a través del que pretende hacer obligatorio el uso de cámaras que sirvan para revisar las jugadas discutidas.La presidenta de Concentración-FORJA elaboró el extenso proyecto a raíz de la polémica jugada que le dio el último título a Vélez con aquel gol de Maxi Moralez ante el Huracán de Ángel Cappa tras una falta del delantero Joaquín Larrivey al arquero Gastón Monzón. «No se trata de decir que se va a hacer algo sino de hacerlo. Nosotros proponemos incorporar la tecnología para arbitrar las arbitrariedades de los árbitros (sic)», explicó la diputada.»Los sistemas tecnológicos instituidos serán establecidos libremente por las asociaciones .Y podrán contar con cámaras, aparatos, balón con circuito electrónico integrado o dotado de inteligencia artificial, máquinas, herramientas, mecanismos, equipos, Internet, cabinas, tableros de control, artefactos, dispositivos, programas informáticos, intercomunicadores telefónicos, telefonía celular, sistemas inalámbricos, de fibra óptica redes, señuelos, recursos, y todos aquellos elementos tecnológicos que permitan la compilación, procesamiento, almacenamiento, transmisión de información voz, datos, texto, video e imagines sobre los partidos de fútbol. La elección del sistema que realicen las entidades nunca podrá desnaturalizar el espíritu y finalidad de la presente ley», detalla el artículo tres de su texto. Aunque según Vázquez, esto serviría también para terminar con la violencia. «Se trata de establecer el impacto que algunos arbitrajes tienen respecto de la violencia. Pero hemos visto que no hay sectores que empujen este cambio, porque incluso lo envié a la AFA y no tuve respuesta», aseguró. «La tecnología le daría transparencia al fútbol y marginaría la violencia, algo que no se logra con más y más policías», opinó la diputada. Y agregó: «El error humano no es el que genera la indignación, sino la acción dolosa del mismo, del que siempre se sospecha».