Miguel Gómez Sanjaume

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El 24 de agosto todo el mundo velaba las armas. Lo hacía el gobierno y los sectores que lo acompañan. Había llamadas nerviosas de algunos que no querían estar afuera del anuncio sobre Papel Prensa La Verdad, también de funcionarios que llamaban a empresarios para confirmar si concurrían o no a la Casa Rosada. De igual manera lo hacia el brazo político del grupo monopólico, el llamado eufemísticamente «la oposición». Y desde allí, se sucedían las llamadas, una compleja red de intereses forzaba la ausencia a Casa de Gobierno, aún de empresarios que comparten la bonanza económica que el modelo kirchnerista les brindó.

Amenazas, seducciones, recordatorios fueron las armas elegidas para tratar de vaciar de presencias lo que según la conducción política de «la oposición», Magnetto, era una vuelta más de rosca de la «chavización».

Es que en el imaginario del golpeado grupo monopólico lo que se venía era una comisión policial que bajo las ordenes de Aníbal Fernández partía a las 19 hs. del día 24 de agosto a detener al Ceo de Clarín; casi al mismo tiempo que Cristina enviaba a Guillermo Moreno al frente de una columna de militantes de Patria Peronista a ocupar «militarmente» la planta de Papel Prensa.

Ese febril delirio, tal vez producto de la desesperación que genera la pérdida de cuantiosos negocios, produjo algunos gafes antológicos.

Pero volvamos un segundo a lo de pérdidas de cuantiosos negocios.

Clarín a pasado a vender entre mayo de 2009 a julio 2010 60.000 ejemplares diarios menos tomando el promedio de lunes a domingo (cifras del IVC Instituto Verificador de Circulaciones).Esto, más allá del monto que implica la venta directa, habría que cuantificar cuanto implica en valores publicitarios.

Si como se informa, Fibertel tiene más de un millón de usuarios y Cable Visión factura por ese servicio individualmente $ 99 la cuenta es fácil, estamos hablando de $ 99.000.000 mensuales a groso modo.

Ni hablar de la desinversión que se acerca cuando se ponga en plena vigencia la Ley de Medios Audiovisuales, o la perdida de competividad en materia del insumo de papel si avanza la obligación de vender el producto de Papel Prensa a un mismo valor para todos los medios.

Esto son solo algunos ejemplos, a lo que habría que sumarle el valor más importante, el más significativo.

Aquel que Clarín instaló en la conciencia argentina como «el poder», si esto comienza a presentar grietas y «las balas» le entran ese «poder» se licua y ya no hay impunidad para hacer negocios a como de lugar.

Pero volvamos a la noche del 24, el grupo monopólico había preparado sus baterías para ese escenario chavista. Se grabaron dos entrevistas donde a partir del presupuesto, que los Kirchner expropiaban o como mínimo intervenían a Papel Prensa pusieron a Jorge Lanata y a Jorge Fontevecchia a denunciar el «atentado» a la libertad de prensa, el atropello y en el caso de Lanata hasta se permitió decir que el estaría con el más débil, Clarín.

Cuan lejos este Jorge Lanata, de aquel, que ponía en su programa a lo que el llamaba, con justa razón, los contra modelos. Maestros de frontera, trabajadores sociales etc., los invisibilizados por los hoy llamados débiles por el mismo Lanata.

Pero no fueron los únicos. El grupo A se había preparado para una conferencia de prensa donde pensaban denunciar el atropello a la libertad de prensa acometido por Cristina al intervenir a Papel Prensa.

Cuando esto no sucedió , perdieron el eje y la conferencia de prensa no se llevó a cabo.

Es que la información dada desde Casa de Gobierno por Cadena Oficial, fue una magistral lección de conducción política.

Una vez más quedó demostrado, que el kirchnerismo luego del 28 de junio recuperó la iniciativa política en todos los terrenos.

Es que la decisión de remitir a la Justicia la causa Papel Prensa así como enviar al Congreso (en donde el mismo gobierno por boca de la Presidenta reconoció estar en minoría) una propuesta de Ley declarando de interés público la producción de papel para diarios, descolocó a los sectores enfrentados a Cristina Kirchner.

Este cronista, a quien alguien alguna vez burlonamente lo asoció con el memorioso Funes de Borges, recuerda algunos episodios de la historia próxima de la Argentina.

Recuerda que en la época del golpe autodenominado Revolución Libertadora un tema de acciones del Diario La Razón, otro de los apropiadores de Papel Prensa, ligadas a un General Cuaranta, a la sazón Jefe de la Side, y a un tal Satanosky, asesinado por ellas, tema que fue investigado en un libro de Rodolfo Walsh.

También que en plena época del Proceso había una importante fábrica de aceite llamada Sasetru de propiedad entre otros de Seitun, Salimei y Truco a quienes se los procesó y se les buscó quebrarlos económicamente como parte de la «política» económica de Martínez de Hoz.

O el proceso que tiene hoy a Martínez de Hoz como procesado por el secuestro del empresario Federico Gutheim y su hijo Miguel en 1976 para obligar a firmar un contrato que el Ministro de Economía quería.

Por edad, recuerda el clima que se vivía en la Argentina durante el inicio del Proceso.

Una parte de la sociedad de a pie presentó una actitud totalmente pasiva al inicio del mismo. Los medios crearon el clima previo y el acompañamiento posterior. Y en cuanto al comportamiento de las fuerzas políticas no peronistas. Se recuerda, desde un Balbín, que soltó la mano al gobierno democrático, hasta sectores políticos opositores que miraron para otro lado cuando salieron los tanques o medios y jueces que actuaron como cómplices del golpe.

En ese clima, espeso y confuso, suena comprensible las declaraciones de Lidia Papaleo que inocentemente vuelve a la Argentina creyendo encontrar justicia desde el lugar de «yo no hice nada malo».

La Presidenta habló de «libertad ambulatoria» para referirse a las condiciones en que la viuda de Graiver se encontraba a la firma de la venta de Papel Prensa.

Si se entiende por libertad ambulatoria la posibilidad de trasladarse de un punto a otro sin tener en cuenta la presencia de los omnímodos falcon verde o el ulular de sirenas, las calles copadas por tropas militares, civiles armados etc., la definición es pasable.

La realidad es que en ese momento uno sentía que si alguien del llamado emblemáticamente «el poder «o más precisamente «los militares» te decía tenés que hacer tal cosa , uno sentía que no quedaba más remedio que hacerlo.

Desde Clarín, La Nación se bombardeaba permanentemente la imagen del grupo Graiver, todos los días aparecía alguna noticia posicionando al grupo en el alter ego demoniaco de los negocios Montoneros, creando de esa manera el clima necesario para operar la apropiación de Papel Prensa.

Es interesante registrar como Clarín y su socio La Nación tergiversa los dichos presidenciales, en ningún momento ni Cristina Fernández de Kirchner ni los hermanos Papaleo declaran que Lidia estuviera detenida al momento de firmar la transferencia de Papel Prensa.

No se detiene allí la manipulación de la verdad, al otro día de las declaraciones de Lidia Papaleo en tribunales Clarín titula Papaleo declaró en la Justicia que estaba libre cuando vendió Papel Prensa.

Podríamos señalar también las burdas operaciones a través de solicitadas de Isidoro Graiver o la carta de María Sol intentando mostrar una Presidenta que miente.

Sospechoso el caso de Isidoro, luego de reconocer penurias económicas luego de la aparición de la solicitada se embarca para Inglaterra.

En ese clima se termina una semana que supo cubrir expectativas y dejar descolocado a quienes permitieron que su febril fantasía les hiciera creer una realidad más cercana a sus necesidades que a ella misma.

Una semana en donde además, Magnetto movilizó todo lo que tenía, puso en el escenario a Julio César Strassera el fiscal de ese juicio acotado que se llamó el Juicio a las Juntas, fiscal que supo jurar por el Estatuto de la Revolución Argentina e interrogó a Lidia Papaleo por su relación con los Montoneros, haciendo caso omiso de las torturas sufridas por ella.

También movilizó a Cristiano Rattazzi ese figurón de Fiat que mientras embolsa grandes ganancias e invierte en la Argentina se contradice hablando de «inseguridad jurídica»

Como será la que viene, la oposición abroquelada detrás de Clarín se defenderá herida y con sus reflejos entumecidos .El Gobierno, medios tiene para ello, tratará de reeditar la gran movilización política y cultural que significó el debate de la Ley de Medios Audiovisuales.

Escuelas Tomadas

En la Ciudad Autónoma Macri enfrenta no solo una comisión investigadora, el tiempo dirá si logra sus objetivos, sino que además tuvo que enfrentar a chicos de no mas de 16 años que más allá de la metodología desnudaron el fracaso de la gestión.

Porque de eso se trata, si las escuelas públicas están deterioradas porque no hay plata es un tema.

Pero si plata hay y lo que pasó es que a casi cuatro meses de la terminación del año y del presupuesto 2010 solo se gastó entre el 5 y el 7 % del Presupuesto de Infraestructura el tema es otro.

No se puede ser ingenuo, en el 2010 se redujo el Presupuesto para las escuelas públicas y se aumento para las escuelas de gestión privada, esto es una política.

Pero además y esto es inoperancia, de la escasa plata que se le había asignado a Infraestructura Escolar , se subejecutó la mayoría del presupuesto.

Esto no es un hecho aislado lo mismo sucede en las áreas de Salud, Social y Cultura.

Macri esta tan golpeado, que tuvo que sentarse a negociar con un grupo de purretes a los cuales los Feinmann y otros intentaron descalificar por «hacer» política.

El sueño presidencial se aleja hasta tal punto que empieza a pensar en volver a postularse para Presidente de Boca, si encima en esa elección le gana Digón uno tendrá que aceptar que Franco Macri tenía razón.