La medida de fuerza, que es llevada adelante por La Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop), realizan un paro por segunda jornada consecutiva, impidiendo el normal inicio de las clases tras el receso escolar de invierno.

La Unión de Docentes Argentinos (UDA), no adhirió a la medida, pero reclamó a las autoridades la apertura de una mesa salarial.

Al respecto, el secretario general de la Agmer, Fabián Peccín, sostuvo que el paro tuvo el lunes una adhesión del 85% en toda la provincia y adelantó que esa cifra podría aumentar durante la jornada de este martes.

También mencionó que el gremio esperará hasta la próxima semana algún ofrecimiento del gobierno y advirtió que, de no concretarse el llamado, «la lucha se va a profundizar”.

El ministro de Educación, José Eduardo Lauritto, dijo que, entre el 2011 y 2012 «se ha dado a los docentes un aumento superior al 40 por ciento y si tomamos los puntos índices aún más”.

“Damos lo que podemos y no escondemos nada, y estamos haciendo un enorme esfuerzo para pagar los salarios y el aguinaldo», agregó.

Asimismo explicó que este mes «se da el prometido aumento del 5 por ciento (que resta de lo acordado en la última paritaria docente), que podrá parecer suficiente o insuficiente, pero estamos cumpliendo y queremos a los docentes y a los alumnos en las escuelas”.

Lauritto ratificó que se descontarán los días no trabajados a los docentes que adhieran a la huelga.

«Sólo se pagará a los docentes los días efectivamente trabajados, conforme al decreto vigente», advirtió.