Ayer, la comisión de diputados y senadores analizó el Decreto de Necesidad y Urgencia que reforma la Ley Nacional de Migraciones y que refuerza los controles migratorios y facilita la expulsión de extranjeros.
El debate contó con la participación de representantes de organizaciones de migrantes y de derechos humanos como Amnistía Internacional, la Red de Migrantes de Argentina, Frente Argentina Migrante, Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Instituto Argentino para la Igualdad, Diversidad e Integración, entre otros.
También estuvo presente el Director Nacional de Migraciones, Horacio García, que defendió el decreto a pesar del rotundo rechazo de los presentes. “La ley 25.871 no ejercía con celeridad las expulsiones. Cualquier ordenamiento en el mundo tiene una parte muy hospitalaria pero también una restrictiva respecto a la migración”, dijo el funcionario.
Mariela Belski, presidenta de Amnistía Internacional criticó que el gobierno avance por decreto sobre la Ley de Migraciones, que tuvo consenso unánime en el Congreso Nacional y es reconocida a nivel internacional. Dijo que de esta manera “se evita el camino del debate, la información y la presentación de distintas posiciones y lastima el sistema institucional y democrático.”
Además cuestionó el decreto porque es regresivo en materia de derechos humanos.
Lourdes Rivadeneyra, de la Red de Migrantes de Argentina pidió que no utilicen a los migrantes como “chivo expiatorio” y que con este DNU no se erradica la delincuencia y el narcotráfico.
Por la Unión de Colectividades de Inmigrantes de Córdoba, habló Marta Guerreño López y señaló que “la ley anterior fue consensuada por numerosas organizaciones. Los migrantes también podemos aportar al debate porque afecta nuestras vidas.”
Nengumbi Sukama, del Instituto Argentino para la Igualdad, Diversidad e Integración se sumó al pedido dirigido a los legisladores integrantes de la bicameral de que rechacen el DNU y declaren su nulidad.
La comisión pasó a cuarto intermedio y reanudará el debate en fecha a definir.
Fuente: FARCO
