Federal

Misiones

Analizan la relocalización de al menos 400 familias

El gobierno provincial junto a las comunas comienzan a realizar un informe preliminar sobre los daños provocados por los últimos desbordes y anegamientos. Uno de los problemas más urgentes que se deberá solucionar es la pérdida total o parcial de viviendas por lo cual se prevé la posibilidad de comprar nuevas tierras para reubicar a los afectados.

En la provincia de Misiones, la inundación golpeó fuertemente en chacras y tierras de cultivo, además de emprendimientos hoteleros en la costa del río Uruguay en los municipios de Panambí, San Javier, Concepción de la Sierra y El Soberbio, donde se dañaron tres escuelas, una municipalidad, cuatro iglesias afectadas al menos 140 comercios.

Tales son los primeros datos preliminares difundidos por el propio gobierno provincial, aunque no se descarta que con el correr de los días haya una variación en las cifras.

En tanto, uno de los problemas más urgentes que se deberá solucionar es la pérdida total o parcial de viviendas.

En este sentido, Juan Carlos Pereyra, el intendente de El Soberbio, una de las zonas más afectadas donde el Uruguay llegó a medir 23 metros , explicó que a partir de ahora, según lo que se habló con el Gobierno de la provincia, será indispensable comprar nuevas tierras para reubicar a quienes perdieron sus viviendas.

“No podemos cambiar el pueblo de lugar como dijo Viviana Rovira porque no hay lugar, pero sí o sí tenemos que comprar tierras para ubicar nuevamente a la gente que perdió sus casas, porque si viene una nueva creciente, puede pasar lo mismo. Y si tenemos ese espacio libre podemos hacer un relleno como se hizo en Posadas, para evitar que se vuelva a inundar”, señaló.

El 80% de la población de El Soberbio es de escasos recursos y reside en construcciones precarias, sumamente vulnerables.

Según las primeras estimaciones, alrededor de 500 familias fueron las afectadas, de las cuales 200 quedaron sin casa, en su mayoría construcciones de madera, porque la correntada la dejó inutilizada o directamente se la llevó. Desde la Intendencia estiman que unos 400 grupos familiares tienen que ser relocalizados.

 

El agua en baja: la reconstrucción

El intendente Pereyra señaló que en el municipio ya trabajan fumigando y limpiando los lugares afectados para que la gente regrese a sus hogares. “Para ello tenemos elementos de limpieza que en parte fueron donadas y otra parte la provee el municipio”, dijo.

Asimismo señaló que las donaciones han ayudado mucho y que ahora lo que más necesitan es alimento “porque ropa hay bastante”. “Y con el ejército, que nos ayuda con los camiones, tenemos un gasto diario de 12 o 13 mil pesos en combustible”, agregó.