Política

Aplauso, medalla y beso

Alberto Fernández viajó a Estados Unidos en contexto de la Asamblea General de la ONU. Mantuvo encuentros con empresarios y con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, quien le refirió que le dijo que el acuerdo “está funcionando”. Luego viajó a Houston para reunirse con inversores petroleros y seguir consolidando el país factoría.

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Mientras el embajador de Estados Unidos en la Argentina continúa manteniendo fluidas reuniones con dirigentes sindicales, políticos, empresarios y funcionarios de distintas líneas de gobierno de la Argentina, el Presidente de la Argentina concentra su agenda en Estados Unidos, lo que desorientaría a cualquiera que analice el momento político con un mínimo sentido de vergüenza.

No pasó una semana desde el regreso de Sergio Massa desde el país del norte, que ya estaba emprendiendo su viaje el presidente Alberto Fernández. El motivo fue la Asamblea General de la ONU, donde realizó un discurso que no concentró demasiada atención, siquiera, en el ámbito doméstico. En el interin, aprovechó la oportunidad para viajar a Houston, Texas, como ya lo había hecho Sergio Massa, para seguir ofreciendo a los empresarios petroleros de Estados Unidos beneficios y garantías para la explotación de los hidrocarburos de nuestro país.

En una diatriba que a esta altura resulta insoportable, Alberto Fernández sigue haciendo referencia a la energía de nuestro subsuelo y a los alimentos de nuestro suelo, como los bienes “que el mundo necesita”. Una rémora sin tapujos del relato que acompaña el modelo de país factoría, subordinado a las cadenas de suministro del imperialismo norteamericano, quien está desarrollando un enorme redespliegue sobre nuestra región para consolidar su pretensión hegemónica en términos globales.

En ese contexto, Alberto Fernández se reunió con Kristalina Georgieva, directora gerente del FMI, quien lo felicitó abiertamente señalando: “Presidente vamos bien, las cosas están funcionando”. Estrictamente no es la primera vez que Georgieva felicita a Fernández, ya lo había hecho cuando se consolidó el ruinoso acuerdo para el país con los acreedores externos (las corporaciones financieras de Estados Unidos) y luego cuando se firmó el acuerdo con el FMI.

Es decir, Georgieva sigue felicitando al presidente de nuestro país, en la medida que se sigue consolidando la dependencia económica.

 

Entre los discursos y los hechos

«Ratificamos la soberanía sobre nuestros recursos naturales como el litio, su industrialización, el beneficio orientado hacia el beneficio de los pueblos, no de transnacionales ni de un pequeño grupo de privilegiados, y la apropiación soberana del excedente económico para ser redistribuido especialmente entre la población de menores ingresos». El que lo dijo fue Luis Arce, presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, país que integra junto a la Argentina y Chile el triángulo del Litio, principal reserva mundial del bien estratégico que mas aumentó su precio en los últimos dos años.

Arce agregó que «Queremos que nuestras reservas de litio no sigan el camino de otros recursos naturales que, en las condiciones del colonialismo y el desarrollo capitalista, sólo sirvieron para aumentar las riquezas de unos cuántos y provocar el hambre de los pueblos», y añadió que la comandante del comando sur de Estado Unidos señaló que el triángulo del litio, conformado por Chile, Argentina y Bolivia «se encuentra en la mira de los Estados Unidos», razón por la que sostuvo que “Naciones Unidas debe tomar medidas contra todos aquellos países que no respeten la soberanía y la no injerencia, y que enfrentan a los pueblos por el control de los recursos naturales estratégicos”.

El presidente boliviano Luis Arce durante su discurso ante la asamblea general de Naciones Unidas – @LuchoXBolivia

Por su parte, en una conferencia en la Universidad The New School en Nueva York, Alberto Fernández sostuvo que «debemos considerar el litio como un recurso estratégico», circunstancia que oportunamente fue rechazada por la liga de gobernadores sentados en la Mesa del Litio, fue descartada por la Secretaría de Minería y por el Ministerio del Interior.

Mas allá de los habituales discursos sin apego con la realidad efectiva con el que acostumbra lucirse el Presidente, la enorme diferencia que afinca la idea común que deslizara Luis Arce y Alberto Fernández, es que el primero viene desandando una estrategia que consolida sus dichos, y el segundo viene encabezando un gobierno que hace exactamente lo contrario a lo que dice.

Lo cierto es que Arce caracteriza aguda y correctamente el tiempo político del redespliegue de los intereses de Estados Unidos en la región, al mismo tiempo en que define el calibre de la amenaza que sufren nuestros países. La oportunidad del desarrollo del Litio boliviano, está atado a la consolidación de una estratégica regional que incluya a la Argentina y Chile en esa misma dirección.

Sin embargo, nuestro país y la estrategia en desarrollo por parte del gobierno del Frente de Todos, apunta a lograr que la premisa boliviana, reclamada largamente por Evo Morales en nuestro país, fracase. La visita reciente de Sergio Massa a Estados Unidos, la reunión mantenida con la multinacional Livent, la dinámica de funcionamiento de la mesa del litio en el seno del Ministerio del Interior, y seguramente el próximo viaje de Wado de Pedro a Estados Unidos que se inicia el 26 de septiembre con los gobernadores del norte grande, apuntan a la extranjerización de uno de los bienes más apetecibles para los intereses norteamericanos.

Otro de los intereses, es Vaca Muerta.

 

“Houston, we have a problem”

Como si el viaje de Massa no alcanzara, Alberto Fernández repitió destino y voló hacia Houston, Texas, para reunirse con 30 empresas de la llamada «Familia Petrolera» como lo graficó la agencia de noticas Télam.

Allí, Alberto Fernández señaló «Necesito convencerlos de que se asocien a nosotros, que vengan a hacer negocios, y esto debe ser política de Estado en la Argentina», para lo cual, les ofreció que se sancionará una ley que les permitirá tener enormes beneficios y “seguridad jurídica” para garantizar sus inversiones.

En esa reunión, como en una feria, Alberto Fernández sostuvo que nuestro país «tiene recursos en condiciones de competitividad y eficiencia para abastecer al mundo de energía», y no sólo por Vaca Muerta sino por la «abundancia de viento, sol y litio». Ese encuentro sucedió durante la noche del 20 de septiembre.

A las cuatro de la mañana del 22 de septiembre, la noche de Plaza Huincul, en la Provincia de Neuquén, se iluminaba de tragedia. Uno de los tanques de la refinería que la empresa New American Oil (NAO) ubicada en la zona este del parque industrial de la localidad, explotaba y arrasaba con la planta entera. Los tres operarios del turno noche, Víctor Herrera de 58 años, Gonzalo Molina de 31 y Fernando Jara de 34, buscaban llegar a la sala de emergencias cuando los alcanzó el fuego.

Fallecieron al instante.

Una tragedia que se cobró la vida de tres trabajadores

NAO produce gasoil, kerosene, fuel oil y en menor medida solventes, lubricantes y diluyentes. En 2017 había adaptado su infraestructura para adquirir crudo de las nuevas áreas no convencionales. Los dueños de NAO son Jorge Arias y Eduardo Mónaco. Además, están vinculados en la empresa de biodiesel Refinar Bio.

Ante el accidente, el Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa decretó paro por tiempo indeterminado y convocaron a una reunión de urgencia junto a directivos de las operadoras, de las refinerías y de las empresas de servicios.

“Se deben tomar medidas urgentes para ponerle fin al permanente desprecio por la vida de los trabajadores como si fueran repuestos intercambiables”, reclamó un comunicado del sindicato. “Es tiempo de poner fin a la avaricia que prioriza las ganancias por sobre la vida de los trabajadores”.

Luego, ante un compromiso asumido con la cámara empresaria, rápidamente se levantó el paro.

En cuanto a la empresa, el especialista Martín Álvarez Mullally desde las páginas de OPSur destaca “La destrucción de las instalaciones fue prácticamente total. Una postal de futuro dentro del escenario desolador de ese área del parque industrial, un cementerio de empresas abandonadas, como Petrolera Argentina y el basurero petrolero EET Servicios Ambientales, que sigue contaminando y sin remediación. En 2006, en ETT Servicios Ambientales hubo un incendio por lo que fue suspendida, la empresa se declaró en quiebra y cerró. Los barros empetrolados sin tratar quedaron ahí abandonados.”

En Houston, los empresarios extranjeros que vienen prometiendo inversiones en el sector desde hace largo tiempo, se frotan las manos con las exenciones impositivas, el precio sostén asegurado para la rentabilidad en la producción, la garantía de giro de divisas y los beneficios que ofrecen ahora Massa y Alberto Fernández.

En Houston, cada funcionario que desfila, muestra cuadros que marcan la forma en que Vaca Muerta fue convirtiéndose en los últimos años en la cuenca que mas energía produce en nuestro país. En el camino del crecimiento de las estadísticas, también se ha multiplicado la rentabilidad de las empresas que operan, ha crecido al extranjerización de la cuenca, se han multiplicado las exportaciones, ha crecido el precio de abasto local para avanzar en sintonía con precios internacionales.

También, en todo este tiempo, en apenas cuatro años murieron 15 operarios petroleros trabajando.

No sólo se muere una porción de soberanía cada vez que se consolida el colonialismo, también mueren trabajadores, que no son alcanzados por las variables exitosas con la que se celebra la dependencia económica de nuestro país.