Argentina le insistirá al G20 para que trate la problemática de los “paraísos fiscales”. Por ello, presentarán en la reunión de octubre en París un documento elaborado en equipo por la Oficina Anticorrupción y Cancillería.
El gobierno nacional insistirá al G20 para que incluya en la agenda de trabajo del Grupo Anticorrupción la “lucha contra los paraísos fiscales” y la “promoción de la transparencia”. Para esto, la delegación argentina presentará en la reunión de octubre en París un documento elaborado por un equipo integrado por la Oficina Anticorrupción (OA) y la Cancillería.
La propuesta intenta abordar temas que se consideran centrales en la promoción de la transparencia fiscal, como el intercambio de información entre agencias fiscales, pidiendo que se incluya, entre otras medidas, «el intercambio automático, la transparencia de la participación en personas jurídicas e instrumentos legales y la limitación al secreto bancario»
El objetivo del trabajo es “combatir la erosión de las bases fiscales; el desplazamiento del tributo sobre ganancias a otras jurisdicciones; y, sobre todo, impedir la facilitación de los flujos financieros ilícitos a través del empleo de los denominados paraísos fiscales”, buscando, además, respaldar las acciones que tienen lugar en otros ámbitos internacionales, como el GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional) y la OCDE (Organización de Cooperación y Desarrollo Económico).
Al trabajo aportaron también de la Unidad de Información Financiera (UIF), la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), el Banco Central de la República Argentina (BCRA) y el Ministerio de Economía.
El documento fue solicitado a la Argentina durante la última reunión del Grupo de Trabajo Anticorrupción del G20, celebrada en Ottawa, Canadá, los días 6 y 7 de junio pasados. A las propuestas presentadas se añadieron parte de los comentarios hechos por otras delegaciones y el resultado del debate desarrollado en allí.
“Este tipo de acciones, tendientes a dificultar el aprovechamiento del producto del delito, son herramientas fundamentales para disuadir y prevenir los actos de corrupción”, evaluó la OA.
