Los trabajadores del Teatro Colón repudiaron así  la «actitud dictatorial» del gobierno porteño, que promovió una acción judicial por 55 millones de pesos contra sus propios empleados, y denunciaron la violación del derecho de huelga ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT). La reacción de los trabajadores fue la consecuencia de la nueva acción judicial presentada por las autoridades del teatro en la que reclaman a los empleados un «daño económico presunto» estimado en 55 millones de pesos por la inactividad derivada del conflicto, que se había originado en una demanda de aumentos salariales y la protección del patrimonio del Colón. Los trabajadores, representados mayoritariamente por  la Asociación del Trabajadores del Estado (ATE), adelantaron además que pedirán, a través de la Legislatura, la interpelación del Jefe de Gobierno, Mauricio Macri, y lo responsabilizaron por una eventual suspensión de la temporada 2011 del Primer Coliseo. «El gobierno porteño intenta modificar el derecho nacional, la Constitución Nacional y local, y eliminar el derecho de huelga en una actitud que raya lo autoritario y perfora el piso democrático», afirmó Rodolfo Arrechea, secretario general de ATE Capital Federal. Cabe recordar que el  gobierno se presentó en medio de la feria judicial de enero para solicitar una medida cautelar para embargar el patrimonio de los trabajadores, a modo de «asegurar» el pago de la eventual condena de una acción de fondo que todavía no se había formalizado. La petición fue rechazada por el juzgado Contencioso Administrativo y Tributario Nro. 13, a cargo de Guillermo Scheibler, quien sostuvo que el gobierno porteño «no acreditó un perjuicio cierto, inminente e irreparable» que justificara la interrupción de la feria judicial. Finalizado el receso, el expediente pasó a manos del Juzgado Nro 8 del mismo fuero, a cargo del magistrado Osvaldo Otheguy, quien por el momento no dio vista del expediente a los ocho delegados denunciados personalmente junto con ATE. «Se busca sancionar económicamente a los trabajadores, inmovilizar el sindicato y avasallar el derecho de huelga. Esto ya no es un conflicto de los trabajadores del Colón, sino que se irradia sobre las relaciones colectivas de todos los gremios», aseguró Arrechea. En referencia a ese  punto, los trabajadores, con la representación de ATE, formalizaron una denuncia ante el Comité de Libertad Sindical de la Organización Internacional del Trabajo, ya que en caso de acreditarse la violación del derecho de huelga, el Estado argentino estaría incumpliendo los convenios internacionales (que en la Argentina tienen valor superior a las leyes de derecho interno) celebrados con ese organismo. «Todo el accionar del gobierno porteño, desde el punto de vista jurídico, ha sido un absurdo. Todo comenzó con una declaración de inconstitucionalidad de la huelga por la Dirección de Trabajo del gobierno porteño y que es una facultad que esa dependencia no tiene. No puede erigirse en juez y parte», precisó Matías Cremonte, abogado de ATE. Por su parte, Máximo Parpagnoli, fotógrafo del Colón desde hace 26 años  y secretario general adjunto de ATE-Teatro Colón, recordó que «fue el gobierno el que abandonó la mesa de negociaciones con los trabajadores y no al revés» y aseguró que los trabajadores pretenden «garantizar» la temporada artística 2011, pero el gobierno genera obstáculos con el comportamiento propio de «una dictadura». «El Colón hoy es un fantasma de lo que era hasta su cierre el 2006. Sólo buscamos recuperar el teatro», expresó. Parpagnoli,  aseguró que Según las autoridades del Colón, la temporada oficial 2011 será anunciada el 1 de marzo y comenzará el 29. Mientras tanto, los trabajadores celebrarán una asamblea general el 16 de febrero cuando retornen a la actividad todos los cuerpos del teatro.