Sociedad

Berni considera que la final entre Vélez y San Lorenzo es de «altísimo riesgo»

El secretario de Seguridad anunció que habrá una reunión para analizar el operativo del partido que puede definir el campeonato y adelantó que en sólo podrán concurrir hinchas locales. Definirán hoy el operativo para el próximo domingo.

Berni busca darle seguridad a la final del campeonato.

El secretario de Seguridad, Sergio Berni, anunció que este mediodía habrá una reunión para analizar el operativo del partido que puede definir el campeonato y adelantó que en solo podrán concurrir hinchas locales. Esto se debe a que Vélez y San Lorenzo cosechan un historial de enfrentamientos que incluyen varios incidentes y muerte de personas. 

 

Tras una semana de tensión, con saqueos en el interior y severos incidentes en el centro porteño, la próxima semana comenzará con un nuevo foco de conflicto. En este marco, las miradas estarán puestas en Liniers, el final del campeonato, donde el local Vélez recibirá a uno de sus clásicos rivales, San Lorenzo.

 

Según adelantaron, el encuentro se jugará con asistencia exclusiva del público local y ambos equipos tienen posibilidad de dar la vuelta olímpica. Los locales necesitan sumar de a tres y esperar otros resultados para analizar sus posibilidades.

 

La matemática y el violento historial entre ambos equipos alertaron a la seguridad para montar un operativo especial para el domingo.

 

El secretario de Seguridad, Sergio Berni, admitió que el partido es «de altísimo riesgo» y que esta mañana se analizarán los operativos pertinentes para la fecha. 

 

«Al mediodía vamos a reunirnos para analizar el operativo, pero apelamos a la responsabilidad de cada uno de los hinchas», solicitó el funcionario.

 

Vélez y San Lorenzo cosechan un historial de enfrentamientos que incluye la muerte de hinchas. La rivalidad nació en 2003 cuando en la previa de un partido con Vélez, San Lorenzo permitió un desfile de peñas en su cancha con la intención de mostrar su gran cantidad de hinchas, acto que fue respondido al año siguiente por el «Fortín», que minutos antes de enfrentar al «Ciclón» paseó sus copas internacionales entre las que destacó la Copa Libertadores, estrella que los de Boedo nunca pudieron colgarse.

 

El enfrentamiento fue superado en 2008 con la muerte de Emmanuel Álvarez, al recibir un disparo en el pecho por parte de un grupo de hinchas de San Lorenzo. Por este motivo, el partido debió suspenderse.