Ahora, los costureros, que trabajaban doce horas cobrando desde el lunes están acampando en la puerta en busca de una solución, la cual nunca llega.
“Hasta el Ministerio de Trabajo de Carlos Tomada y el Sindicato del Vestido SOIVA, de la mano de Luis Bellido, sub secretario de gremiales, engañaron a los costureros junto a la patronal, prometiéndoles el viernes que se vayan a sus casas que el lunes volverán a trabajar, allanando así el camino para que el fin de semana que paso, estos delincuentes vacíen la empresa. Esto fue denunciado por los vecinos que vieron varios camiones que entraban y salían”, señalan desde la Alameda.
Sin embargo el martes, la gendarmería nacional y la PFA reprimieron a los costureros estafados que reclamaban en la puerta, a pedido de Maricel Bolo.
Montagne, Cheeky, Prestige y Wilson, son responsables de la situación de los costureros, como bien lo establece la Ley de Trabajo a Domicilio, pero hasta ahora desaparecieron, prometiéndoles a los costureros solucionar el conflicto.
Mañana jueves a las 10, los costureros realizarán una asamblea en la puerta de la empresa ubicada en Zañartu y Doblas, en el barrio de Parque Chacabuco, para resolver los pasos a seguir.
Fuente: La Alameda