Sociedad

Sesión maratónica

Diputados dijo sí al Aborto Legal

Con el país expectante y la inmensa ola verde inundando calles y redes, el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo (IVE), pasa a Senadores y está a muy poco de convertirse en ley.

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Tras una maratónica sesión que comenzó ayer en horas de la mañana, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) presentado hace tres semanas por el Poder Ejecutivo. El proyecto que históricamente configura una urgencia para millones de mujeres, niñas y personas gestantes, volvió a conseguir la media sanción.

A pesar del contexto adverso para las movilizaciones por la pandemia de Covid-19, ambos lados del pañuelo decidieron salir a la calle. No obstante, el lado “verde”, a pesar de solo haber convocado comisiones representativas de cada colectivo y organización, para poder respetar el distanciamiento social, ganó por goleada dentro y fuera del recinto a nivel convocatoria. Los escraches, las violentas persecuciones y los intentos de desestabilización democrática de los sectores opositores a la legalización del aborto, perdieron peso con la visibilización del apoyo masivo a la iniciativa.

Con 131 votos a favor, 117 en contra y 6 abstenciones, el proyecto quedó aprobado con media sanción por la Cámara Baja y ya está listo para ser discutido en última instancia por el Senado. Aunque con los votos justos, las cuentas de voto a voto dan esperanza a la “ola verde” de que la legalización del aborto para todas las personas gestantes hasta la semana 14, sea cual sea el origen del embarazo, se convierta en una realidad.
“La clandestinidad nunca salvo a nadie” fue la frase que flameó en las banderas y pancartas afuera del Congreso y el eje sobre el que debatieron los y las diputadas dentro del recinto argumentando a favor de la Ley. El sector “celeste” de la Cámara Baja, redundó en justificaciones morales y religiosas, mientras sus manifestantes, organizados sobre todo bajo el ala de la iglesia evangélica, hicieron lo mismo afuera. El sector que proclama “salvemos las dos vidas” no dijo nada sobre la red de trata que se desbarató durante el fin de semana y que funcionaba en sedes de la iglesia evangélica; tampoco de las denuncias por abuso a menores de la semana pasada; pero sí repitió una y otra vez que el lado “verde” que pretende salvar miles de mujeres y niñas de la muerte y de afecciones graves de salud, es el lado de las “asesinas”.