De la meteorología depende que ella pueda comenzar los actos (a las 13 hora argentina) con un desfile desde la Catedral hasta la rampa del Congreso Nacional, escoltada por la caballería de la Guardia Presidencial.Si llueve ese desfile se suspendería e incluso, si las precipitaciones son fuertes, la flamante mandataria no daría el discurso desde una de las terrazas del Palacio del Planalto (sede del gobierno federal) ante los cientos de militantes que se cree que se congregarán frente al edificio, en la Plaza de los Tres Poderes.El cielo permanecía abarrotado de nubes este mediodía, con clima fresco, y el suelo mojado por lluvias intermitentes que se registraron en la mañana temprano, en tanto el pronóstico augura un 90 por ciento de probabilidad de chaparrones para toda la jornada.En el Planalto improvisaban ayer un pequeño techo de plástico en la terraza desde donde hablaría la flamante presidenta, ante una plaza que ya tenía decenas de manifestantes acampando para presenciar el histórico acto.Luego del desfile previsto, la primera presidenta electa de Brasil será recibida por el titular del Senado, José Sarney, quien la escoltará hasta el plenario en la Cámara de Diputados, donde Rousseff jurará el cargo y ofrecerá su primer discurso frente a funcionarios, legisladores y un importante número de mandatarios y representantes de gobiernos de diversos países.Luego, la ex jefa de gabinete se trasladará al Planalto, donde Lula le entregará la faja presidencial.