Sociedad

Greenpeace escrachó un hipermercado de la construcción

Con el objetivo de que la empresa Eternit se comprometa a remediar un predio ubicado en la Cuenca del Riachuelo en el que fueron dispuestos residuos de amianto de forma ilegal, los manifestantes alertaron a los consumidores sobre el comportamiento ambientalmente reprochable de la firma.

Greenpeace reclamó ayer a la empresa Eternit, fabricante de productos para la construcción, que se comprometa a remediar un predio ubicado en la Cuenca del Riachuelo en el que fueron dispuestos residuos de amianto de forma ilegal.

Frente al supermercado especializado en productos para la construcción de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano, activistas de Greenpeace alertaron a los consumidores sobre el comportamiento ambientalmente reprochable de la empresa, responsable de las marcas Durlock, Cerámica San Lorenzo y Eternit.

Los activistas, apoyados por un cartel móvil y pancartas con la leyenda “Eternit Envenena la Cuenca del Riachuelo”, entregaron volantes que simulaban ser las ofertas de los supermercados, identificando cuáles son los productos fabricados y comercializados por el grupo contaminador y advirtiendo  a los clientes sobre las irregularidades que cometió Eternit poniendo en riesgo la salud de la población de La Matanza.

La idea fue que Eternit se haga responsable de la disposición segura de los residuos de asbesto y de la remediación total del predio, ubicado en la localidad bonaerense de González Catán.

Asimismo, Greenpeace volvió a reclamar a la empresa la urgente remediación del predio ubicado en la Cuenca del Riachuelo, donde se encuentran depositadas restos de amianto, un material altamente tóxico, en precarias condiciones de disposición final.

La organización ambientalista denunció meses atrás, la presencia de la sustancia comprobadamente cancerígena, sin ningún tipo de medida de seguridad, sobre y bajo la superficie de un predio perteneciente a Eternit.