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El Papa cuestionó el aborto, la eutanasia y los casamientos gay

Según Benedicto XVI, estas prácticas ponen en peligro la paz. Lo dijo en el marco del primer día del 2013 con ocasión de la Jornada Mundial de la Paz, divulgado con anticipación por el Vaticano. Asimismo acusó a quienes defienden estas prácticas de “no apreciar suficientemente el valor de la vida humana”.

El papa Benedicto XVI atacó el aborto, el matrimonio gay y la eutanasia porque ponen en peligro la paz, según escribió en el mensaje que leerá el primer día del 2013 con ocasión de la Jornada Mundial de la Paz, divulgado con anticipación por el Vaticano.

«Los que trabajan por la paz son quienes aman, defienden y promueven la vida en su integridad», escribió el Papa en el mensaje que se leerá en todas las parroquias el próximo 1º de enero.

Asimismo marcó que «quienes no aprecian suficientemente el valor de la vida humana y, en consecuencia, sostienen por ejemplo la liberación del aborto, tal vez no se dan cuenta que, de este modo, proponen la búsqueda de una paz ilusoria. (…) La muerte de un ser inerme e inocente, nunca podrán traer felicidad o paz», afirma el Papa. «Quien quiere la paz no puede tolerar atentados y delitos contra la vida», agregó.

«Cualquier agresión a la vida, en especial en su origen, provoca inevitablemente daños irreparables al desarrollo, la paz y el medio ambiente», sentencia el Pontífice y añade:»¿Cómo es posible pretender conseguir la paz, el desarrollo integral de los pueblos o la misma salvaguardia del ambiente, sin que sea tutelado el derecho a la vida de los más débiles, empezando por los que aún no han nacido?», se interroga Benedicto XVI.

«Tampoco es justo codificar de manera subrepticia falsos derechos o libertades, que, basados en una visión reductiva y relativista del ser humano, y mediante el uso hábil de expresiones ambiguas encaminadas a favorecer un pretendido derecho al aborto y a la eutanasia, amenazan el derecho fundamental a la vida», advierte.

También reitera que el matrimonio es entre un hombre y una mujer y pidió defenderlo «frente a los intentos de equiparlos con formas radicalmente opuestas de unión, que en realidad dañan y contribuyen a su desestabilización».