El Archivo Nacional de la Memoria (ANM) de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y los cuarenta organismos nacionales, provinciales y municipales de todo el país que integran la Red Federal de Sitios de Memoria manifestaron su más enérgico repudio por las inscripciones intimidatorias en el ex Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio (CCDTyE) «Automotores Orletti», ubicado en el barrio porteño de Floresta.Este repudio se desató a raíz de que el 31 de agosto pasado, el frente del edificio y el muro ubicado en el terreno aledaño al CCDTyE quedó empapelado con afiches que llevaban la firma de «Radio Aramburu» y expresaban: «Atención. Ayer las guerrillas terroristas con conexión internacional iniciaron una guerra contra el pueblo de la Nación Argentina para tomar el poder e instalar un sistema comunista». También, aparecieron las leyendas «Aquí se ajustició a terroristas asesinos» y «asesinos zurdos».Como consecuencia, el comunicado firmado por la coordinadora ejecutiva del ANM y de la Red Federal de Sitios de Memoria, Judith Said, expresa: «Todos los procesos que se están llevando a cabo en la actualidad están permitiendo que todos los responsables del Terrorismo de Estado estén siendo juzgados por los hechos ocurridos durante la última dictadura cívico militar. Para los responsables de los delitos de lesa humanidad es inconcebible que se estén llevando a la práctica sus juzgamientos».»Por esto nos sumamos al repudio unánime sobre las acciones intimidatorias que se produjeron en el CCDTyE ‘Automotores Orletti’, como así también el hecho sufrido en la señalización vial al ex CCD ‘La Perla’ en Córdoba; las placas en la ex Jefatura en la ciudad de Tucumán, y la agresión en ‘La Casona’, sede de la Secretaría de Derechos Humanos de Río Negro. Todas estas acciones nos conducen a no claudicar y continuar fortaleciendo las políticas de Estado que se vienen implementado sobre la base de los pilares de Memoria, Verdad y Justicia», concluye el comunicado.En junio pasado el Tribunal Oral en lo Federal Número 1 inició el juicio a seis represores de ese centro clandestino por los delitos de privación ilegal de la libertad, imposición de tormentos y homicidio calificado, en perjuicio de 65 víctimas.