Cultura

Presentan libro sobre la represión de la libertad sindical en Clarín

El mismo trata sobre la sistemática obstrucción a la libertad sindical en el medio, y cómo se trata de condicionar el movimiento sindical interno, en sintonía con las aspiraciones políticas y empresariales del grupo económico.

El libro «Periodismo de Infantería» describe los cien días de experiencia sindical en Clarín, durante 2001, y la reacción, método e ideología usados por la empresa para «aplastar» esa posibilidad en uno de los diarios más importantes de habla hispana.

Virginia Márquez señaló que lo hará este  jueves 13 a las 19.00 hs, en la Avenida Córdoba 2145. El 19 de octubre los autores irán a la Universidad de Lomas de Zamora, para realizar un intercambio con estudiantes de la Carrera de Comunicación en Movida Universitaria.

«Queremos llegar al público que creemos puede interesarle: militantes y estudiantes. De ellos es el presente y nosotros debemos cumplir en resguardarlos y quitar las piedras de su camino. De esta manera ya no habrá una generación perdida sino recuperada», dijo la coautora.

El trabajo contiene además la carta, llamada por Márquez ´El Manifiesto de Magnetto´, que el CEO del Grupo Clarín envió el 12 de noviembre de 2010 a jefes y editores para ser discutida en un retiro en Mar del Plata, y analiza asimismo el caso de los menores adoptados por la dueña del matutino.

Escrito en tres partes, la primera detalla los intentos de los periodistas del diario por organizarse sindicalmente para resguardar derechos que la constitución argentina garantiza; la segunda la adquisición de Papel Prensa y de Canal 13; y en tercer lugar el caso de Marcela y Felipe Herrera Noble con un reportaje a Estela Carlotto y Chicha Mariani de Abuelas de Plaza de Mayo.

«Para nosotros el tema Marcela y Felipe muestra cómo se consuma la barbarie del vencedor, porque se trata de la apropiación de los hijos de los vencidos», afirmó Márquez durante una entrevista con Télam acompañada por el coautor del libro, Aníbal Ces.

Márquez fue redactora de la sección Mujer de Clarín e integró la junta electoral durante el intento de organización sindical en 2001, mientras que Ces se desempeñaba en la sección Infografía y formó parte de la lista triunfadora que actuó durante cien días hasta que fueron despedidos.

«Todo fue un plan sistemático, el libro trata de unir las piezas sueltas porque a simple vista parecen conflictos separados», aseguró Márquez al considerar que «publicar este alegato es una obligación nuestra para que todo el mundo sepa lo que ocurría en un diario del prestigio que supo tener Clarín».

«Periodismo de Infantería» cuenta cómo fueron despedidos los integrantes de la comisión interna elegida y también los de la junta electoral, pero también detalla la «actitud dual» de la Union de Trabajadores de Prensa (UTPBA), que según Márquez prefirió «descalificar» a integrantes de esa comisión interna, y que hasta «propició nuestros despidos como manera de preservarse».

Entre quienes avalaron con su accionar los despidos, los autores destacan «el rol de la entonces ministra de Trabajo de la alianza, Patricia Bullrich».

«Entonces salimos como gato mojado con la cola entre las patas, pero en los últimos años algo cambió y por eso nos atrevimos. El Gobierno abrió un paraguas político que antes era impensable», señaló Márquez.

A su turno, Ces, recordó que la experiencia sindical «de agosto a noviembre del 2001 terminó como las otras porque siempre fue así, es la historia de Clarín, donde había organización de los periodistas lo cortaban de raíz, a diferencia de los gráficos que tienen delegados».

Agregó que esa empresa «nunca permitió nada, en el 76 despidieron a la comisión interna, en el 82 volvieron a echar a los que iban a ser delegados. En el 90 echaron a Pablo LLonto, el único que quedaba de una interna muy combativa».

«Intuía que nos iban a echar aunque empezamos a creer que era posible una experiencia gremial en Clarin. Al que yo entré en el 90 era un diario, pero del que salí era un multimedios, y hoy es el vocero de la oligarquia. Devino de diario de la burguesía nacional a vocero de la oligarquía», completó Ces.

Marquéz precisó que la edición es propia porque no querían que «digan que lo pagó el Gobierno» pero que tienen «muchas dificultades para distribuirlo o que sea exhibido. Quizás es que no tenemos mucha experiencia, quizás hay interesados boicoteando el trabajo», estimó.