Primero fue un partido de fútbol con el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, en enero de 2012. Seis meses después, mantuvo otro encuentro deportivo, en junio, pero  con el líder de la CGT Azopardo, Hugo Moyano.

Y cuando las aguas se creían algo calmas, este año volvió a reunirse con Moyano y fue a cenar con el ex vicepresidente Julio Cobos, en febrero, lo que avivó los roces entre la Casa Rosada y la Provincia, seguido por los reclamos de mayor coparticipación que hizo el sciolismo a la Nación.

“No busquen interpretaciones malignas de supuestos encuentros con la oposición. Yo me manejo en la vida con mucha más naturalidad”, lanzó firme Scioli al tiempo que remarcó que él “siempre” habla “con todos los sectores de la vida política, de la producción y el trabajo, sea de un partido o de otro”.

En ese sentido, el gobernador bonaerense dejó en claro que seguirá manteniendo esa política y admitió: “Cuantas más dificultades encuentro en el camino, más quiero hablar con todos».

“Cansado” y «podrido» de las críticas surgidas del seno del gobierno nacional por las reuniones que tuvo con Moyano, Macri y Cobos, entre otros dirigentes disidentes como Francisco De Narváez, Scioli comentó que conversó sobre el tema con la presidente Cristina Kirchner para “aclarar las cosas”.

“Un día charlando con la Presidenta le dije: Quiero hablar con vos porque dicen que estás muy molesta y enojada por tal foto, de hace unos meses atrás. Le expliqué que tengo encuentros, pero que se quedara tranquila. Ella me contestó que la foto no le preocupa, sino que se deja guiar por mis actitudes en los momentos clave que ella necesitó de mi presencia, colaboración y respaldo. Y me dijo: vos ahí siempre estuviste. Y eso es lo que a mí me importa”, subrayó Scioli en declaraciones al canal TN.

“Algunos hacen de todo esto un folklore e interpretaciones que no corresponden”, puntualizó  el mandatario provincial y citó como ejemplo que él encontró en el territorio bonaerense “una actitud de gran responsabilidad y constructiva en la amplia mayoría de los sectores opositores de la provincia”.

En tanto, Scioli evitó polemizar con la diputada oficialista Diana Conti, quien le reclamó subordinación: «Este tipo de discusiones no le mejora la vida de los argentinos», sostuvo y añadió: «Muchas veces se requiere más fortaleza en no responder».

«Estoy acá porque vi mucha gente preocupada, a partir de todas estas versiones, algunos ataques, de las expresiones de algunos, entonces que la gente se quede tranquila, que confíe más que nunca, que tenga la seguridad de que nosotros nos estamos ocupando de enfrentar las cosas que tenemos que enfrentar», remarcó.

«Yo voy a ser siempre parte de las soluciones, no de los problemas, que ya bastante tiene la gente y la Argentina», enfatizó el gobernador, en un intento por bajarle el tono a los cortocircuitos que mantiene con el kirchnerismo.