Además, quienes no puedan concurrir, podrán dejar sus libros en cualquier lugar público o medio de transporte del país, así como también recogerlos si los encuentran.Según los organizadores, “En el acto de desprenderse de un libro querido se estimula la multiplicidad de las lecturas. Cuando un libro es leído sólo una vez no aprovechamos el máximo de su potencial”.La suelta de libros se enmarca en el Día Internacional de la Bibliodiversidad, que se celebrará  en diez países de Latinoamérica. Según la Alianza de Editores,” la fecha, en concordancia con el Día de la Primavera del Hemisferio Sur, fue elegida por evocar “ el contraste de colores, el reverdecimiento, la transición, el amor, perfume, el anuncio de lo nuevo. Y el Sur connota la posición de periferia del sentido de circulación de las ideas en un mundo globalizado.” El concepto de Bibliodiversidad refiere a la “diversidad cultural aplicada al mundo del libro” y estimula “la defensa de un variado repertorio de voces y el acceso universal a la información y el conocimiento”según los organizadores.