El próximo 10 de diciembre, la ciudad de Ushuaia podría quedarse sin servicio de transporte público de colectivos, ante el vencimiento el 10 de diciembre del vínculo entre la Municipalidad y la empresa Autobuses Santa Fe SA.

Esta situación ha causado una serie de cruces entre sectores políticos locales, choferes que buscan defender sus puestos laborales y los más de 3000 usuarios que día a día utilizan el servicio.

En diálogo con Radio Provincia, el concejal Mario Llanes (PJ) manifestó su “preocupación” por el tema y planteó que “no sabemos qué va a pasar con los 3.000 usuarios que día a día utilizan el servicio, más allá de entender la situación de los trabajadores de la empresa” que reclaman que se les garantice la continuidad laboral. 

En el marco de un conflicto que ya lleva varias semanas, el edil fue crítico con las autoridades locales. Si bien señaló que el Municipio “envió el pliego y nosotros nos tomamos el trabajo de proponer más de 50 modificaciones y también hubo propuestas de los trabajadores y de los vecinos”, remarcó que “la realidad es que tenemos una situación muy complicada”.

El bloque que integra propuso diversas modificaciones al proyecto del ejecutivo, entre las que solicitó la continuidad laboral de los choferes. Finalmente, Llanes afirmó que “la facultad de modificar o no el pliego original es del Ejecutivo municipal”, en tanto “nosotros lo que luego podemos hacer es aprobar o no el pliego”.

“Paralizar la provincia”

Por su parte, en diálogo con UN, el secretario General de la Unión de Conductores de la República Argentina (UCRA), Silverio Gómez, dijo que el gremio paralizará la provincia si la empresa Autobuses Santa Fe se retira el 10 de diciembre y deja a los choferes sin trabajo.

Asimismo, se hicieron presentes en el Concejo Deliberante local, donde increparon al concejal Oscar Rubinos.

“No van a dar ningún servicio municipal porque no se lo vamos a permitir”, sostuvo el dirigente ante la prensa local, y además aseguró que “esto es una maniobra del intendente con Alejandro Rossi (representante de Autobuses Santa Fe) para que desaparezca la UCRA”.

En este sentido, señaló que “si el intendente ya sabía que el 10 de diciembre vencía el contrato con la empresa, su obligación era antes de esa fecha abrir los pliegos de licitación para darle la oportunidad a otra, a que se presente y siga manteniendo el servicio”.

Esta actitud de los choferes de la UCRA fue repudiada por el secretario de Gobierno, José Luis Ghiglione, quien llamó a la reflexión y a encaminar la discusión “por el camino del respeto y la tolerancia”, sobre todo teniendo en cuenta, “que mal que les pese a algunos, los concejales han sido elegidos por el pueblo y no están ahí por mero capricho”.

Finalmente, el funcionario expresó que “la Municipalidad está realizando un gran esfuerzo para que los vecinos de la ciudad no se queden sin servicio de colectivos” y consideró que “buscar una solución a través de las amenazas, no aportará a la solución del tema”.