El policía Darío Poblete, condenado a prisión perpetua por el crimen del docente, fue visto en una calle del centro de Neuquén, reveló el gremio docente provincial.

Es la segunda vez en un año que Poblete es denunciado por circular libremente por las calles cuando, según el fallo de la justicia, tiene que purgar en la cárcel su condena por el asesinato del maestro neuquino.

 El secretario general de la Asociación Trabajadores de la Educación de Neuquén -ATEN-, Daniel Huth señaló que «esta mañana un compañero docente vio a Poblete caminando por una calle de la ciudad y de inmediato dio aviso de lo que estaba pasando».

«El hecho es totalmente repudiable, la rechazamos y tiene que ver con que Poblete no está en el lugar donde tendría que estar», afirmó.

Precisó que «Poblete tendría que estar alojado en la U9 del Servicio Penitenciario Federal y no en la Unidad 11 custodiado por la policía provincial y donde permanece en un sector de casas de preingreso».

Asimismo agregó que «vuelve a ocurrir lo de Zapala y por esos las denuncias que se hicieron fueron para que quede preso en la cárcel federal».

Huth dijo que «sigue estando con situaciones de privilegio e incluso en la Unidad 11 trabaja personal que tiene alguna relación familiar con él».

Consideró que «el Tribunal Superior de Justicia aún no resolvió un recurso presentado por la defensa de Poblete para evitar que sea trasladado a otra cárcel».

Aseguró que «tiene que tomarse una resolución inmediata para que Poblete este en la cárcel federal» y anticipó que van a solicitar una audiencia con los jueces para que resuelvan esta cuestión.

La comisión directiva del gremio docente se reunirá esta tarde para definir las acciones que emprenderán junto con los abogados para lograr el cumplimiento de la prisión perpetua de Poblete.

El 14 de junio del año pasado, el fotógrafo del diario «La Mañana Neuquén», Bruno Tornini registró la imagen de Poblete caminando por el centro de Zapala luego de comprar medicamentos en una farmacia de esa ciudad.

Poblete fue condenado a prisión perpetua por el crimen del docente neuquino Carlos Fuentealba ocurrido el 4 de abril de 2007 durante una protesta sobre la ruta nacional 22 en el paraje Arroyito.