Esta iniciativa se propone dar mayor eficiencia y seguridad al sector del transporte de carga, reemplazando unidades antiguas por otras 0 km de potencia mayor a 200 HP (camiones de carga semipesados), e implica también un incentivo a la producción local de camiones. Además traerá aparejado un uso más eficiente del combustible y un menor impacto en el medio ambiente.
El acuerdo, suscripto por el Ministerio de Industria, el Banco Nación y Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), permite que por cada unidad enviada a destrucción y compactación, su propietario recibirá una compensación de entre 25.000 y 35.000 pesos. El vehículo debe tener más de 30 años y estar en funcionamiento al momento de ser entregado.
Los transportistas elegibles deberán presentarse ante el Banco Nación que, en caso de corresponder, otorgará un crédito -que será utilizado para adquirir una nueva unidad- por hasta 5 años de plazo, con una tasa fija en pesos que contará con una bonificación del 2% anual a ser otorgada por la Sepyme. La tasa del crédito a pagar por los transportistas del norte grande será del 10,5 % anual, mientras que para el resto del país la tasa será del 12