La iniciativa, que de aprobarse pasará al Senado para su tratamiento, establece que todos los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires estarán obligados a extraerse una muestra de ADN a través de un sistema de identificación por huellas dactilares.
De acuerdo al proyecto, el método «no es invasivo ni contaminante y será universal para todos los habitantes».
La primera muestra se obtendrá «al momento del nacimiento y/o defunción de las personas», y luego podrá ser actualizada cuando se expida o renueve el documento nacional de identidad y/o el carnet de conducir.
«El objetivo del proyecto es ayudar a obtener datos fehacientes y en tiempo real para cotejar con perfiles genéticos en el área forense, sea para casos de abusos sexuales, crímenes, robo de bebés o desapariciones de personas, como también para juicios filiatorios o situaciones de averiguación de identidad ante una tragedia», explicó el diputado Darío Golía, autor de la propuesta, en declaraciones formuladas a esta agencia.
Asimismo aclaró que «no vulnera ningún derecho a la intimidad, ya que la información de la base de datos del banco de datos será secreta y solamente se encontrará disponible para el Ministerio Público y los magistrados intervinientes en las causas en que se encuentre interviniendo».
Sostuvo Golía que «esto dotará a la justicia de mayores garantías y seguridad», y consideró que «será un buen aporte como medio probatorio».