Candela Sol Rodríguez, la nena de once años que desde el lunes pasado falta de su hogar en Hurlingham continúa desaparecida y trabajan en su búsqueda participan más de 1600 policías.

En las últimas horas, la búsqueda se concentró en diez viviendas cercanas al domicilio de la niña, aunque no se descartan otros lugares y por eso también la buscan en países limítrofes a la Argentina.

A los dos helicópteros, 16 perros rastreadores y el personal de las fronteras se sumó ayer la Interpol, y la ciudad bonaerense se movilizó para reclamar que aparezca con vida.

En tanto, Carola Labrador, la madre de la chiquita, se mostró confiada en que la niña retornará al hogar y aseguró que «no van a poder» con ella, que siente que «Candela está viva y cada vez más cerca» suyo y que cuando «reciba la noticia de su aparición» va a «salir corriendo y a gritar por todos lados».

«Yo sé que hay gente buena que aportará datos, y también sé que otra gente irá por la plata que se ofreció de recompensa, pero está bien, con tal de que mi hija aparezca, todo será válido y bienvenido», concluyó la madre quien solicita que quienes tienen información la brinden para dar con el paradero de su hija.