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Cuba autorizó la compra de autos 0 km

Desde ahora, no habrá de necesidad de pedir una autorización al Gobierno para adquirir autos nuevos. El Estado consideró que “las ‘cartas de autorización’ ha resultado inadecuada y obsoleta”.

Cuba liberó la compra de autos.

Desde ahora los cubanos podrán comprar automóviles cero kilómetro sin necesidad de un permiso del Gobierno.

 

 Desde la revolución, los cubanos sólo podían comprar automóviles nuevos con una “carta de autorización” que el Estado entregaba a algunas personas como reconocimiento de sus méritos. En los últimos años los principales beneficiados fueron los médicos y otros profesionales que regresaban de misiones en el exterior.

 

Ahora el Consejo de Ministros decidió finalmente liberar la venta de autos, motos y camionetas nuevas -y usadas- en las concesionarias del Estado. “La venta a los particulares por medio del mecanismo de las ‘cartas de autorización’ ha resultado inadecuada y obsoleta”, informó Granma, el diario oficial del gobernante Partido Comunista.

 

Esto tiene como precedente que a fines de 2011, el presidente Raúl Castro -principal impulsor de los cambios- había autorizado la compra y venta de autos de segunda mano entre particulares. En Cuba los automóviles nuevos son importados por el Estado o por mixtos con participación del Estado.

 

Granma dijo que el sistema de cartas se había convertido en una “fuente de especulación y enriquecimiento”, pues algunas de las personas compraban autos en las concesionarias del Estado y los revendían por un valor varias veces superior en el mercado privado.

 

“Ante estos problemas, y después de varios meses de estudio, se decidió eliminar los mecanismos existentes de aprobación para la compra de vehículos de motor al Estado”, marca.

 

Los precios de las motos, autos, camionetas y pequeños autobuses nuevos y usados vendidos por las concesionarias del Estado serán similares al del mercado privado, indicó el periódico. La medida beneficiaría, por ejemplo, a pequeños empresarios y agricultores que han ganado poder adquisitivo con las reformas de Raúl Castro.