Política

Solamente durante marzo

Diputados ya sesionó lo mismo que en 2011

Con la nueva conformación, la Cámara baja recuperó su actividad, en contraste con lo que ocurrió durante todo el año pasado. Se aprobaron leyes clave pedidas por el Ejecutivo. Se espera un ritmo similar para todo el año.

 

El contraste, por ahora, es alto: a un mes del inicio de las sesiones ordinarias del Congreso, la actividad legislativa es altamente superior a lo que ocurrió en 2011, cuando el año electoral y la supremacía opositora conspiraron contra el buen funcionamiento en ambas cámaras.

El ejemplo más claro se da en Diputados: contando la apertura legislativa, hubo 5 reuniones, la misma cantidad que en todo el año pasado. Un cambio sustancial en la actividad de la Cámara.

Pero además, en las pocas semanas desde que se inició el período legislativo, hubo varios proyectos importantes que se aprobaron, la mayoría reclamados por el Ejecutivo. La discusión por el traspaso del Subte (convertido en ley la semana pasada), y la reforma a la Carta Orgánica del Banco Central, fueron las estrellas de la agenda del Congreso durante marzo.

Asimismo, el oficialismo también pudo motorizar en ambas cámaras el tema Malvinas y el repudio al Golpe de Estado de 1976. Y ya está en camino el cambio en el DNI y la reforma en el Código Electoral, anunciada por la presidente Cristina Kirchner la semana pasada.

El contraste es total: en todo 2011, hubo apenas cinco sesiones en Diputados y 11 en el Senado. El atenuante, aunque no justificado, fue que se trató de un año electoral, en el que la mayoría de los legisladores se ocuparon de la campaña más que de legislar.

Pero la causa principal fue otra: el supuesto control que la oposición había logrado tras las elecciones legislativas de 2009 no se pudo plasmar, ya que no contaban con el número necesario para lograr el quórum propio. Y todo quedó enredado en una lucha política que prácticamente paralizó al Congreso.

Ahora, con mayoría oficialista en ambas cámaras, todo parece marchar sobre ruedas, y el Congreso aspira a tener un nivel de actividad acorde con el buen funcionamiento institucional de una democracia.

 

Fuente: Infobae