Francia goleó por 4 a 2 a Croacia ayer en el Estadio Luzhniki de Moscú y se alzó con la Copa del Mundo. En una partida emocionante, que contó con el arbitraje de Néstor Pitana, acompañado Juan Pablo Belatti y Hernán Maidana, como jueces de línea, y Mauro Vigliano, como asistente del VAR, el seleccionado galo hizo valer su superioridad futbolística.
A poco de comenzado el partido, Francia ya estaba en ventaja por 1 a 0 con un gol en contra de cabeza de Modric. Si bien Croacia pudo empatarlo y soñar con un triunfo, los galos volvieron a ponerse arriba gracias a un penal y luego ampliaron la ventaja hasta el 4 a 1 en el segundo tiempo.
Gracias a un error del arquero francés, los croatas descontaron pero sobre el final no pudieron concretar nuevas situaciones y el marcador cerró en 4 a 2 para Francia, que se lleva su segunda copa del Mundo.
Entre el público estaban presentes el presidente ruso, Vladimir Putin, y sus pares de Francia y Croacia. Durante el comienzo del segundo tiempo, irrumpieron integrantes de las Pussy Riots -un grupo de punk feminista local- para protesar contra la represión del Gobierno y fueron retiradas por la seguridad.