Política

Irregularidades y muerte en el Maldonado

La Asociación vecinal “Lago Pacífico”, elaboró un informe en el que se detallan las numerosas irregularidades que presenta la obra del Arroyo Maldonado y se denuncia la muerte de un buzo.

Las obras finalizarían el año que viene. (Foto: Silvina Arrastía)

La Justicia había ordenado detener las obras de entubamiento, pero desde el gobierno porteño no se acató la medida. Y en consecuencia se produjo el fallecimiento del operario. Otros cargos que se le imputan a la gestión Macri, son que la obra no es inspeccionada y que el ingeniero a cargo  no tendría  título habilitante, pero si tuvo  responsabilidad en la tragedia de Cromañón. La obra del Arroyo Maldonado es un proyecto estratégico que se ha planteado en la  Ciudad  para  poner fin a las inundaciones que provocan las lluvias, a través de túneles aliviadores. La empresa a cargo de la obra es Ghella S.p.a., multinacional de capitales italianos que está asociada con Iecsa, cuyo presidente es el primo hermano de Mauricio Macri, Ángelo Calcaterra. La obra, según la norma que la reglamentó, debe contar con todos los recaudos que garanticen la vida de sus trabajadores ante  eventualidades. El  responsable de que se hagan las inspecciones para constatar que esté todo en orden es el director de obra Eduardo Samuel Cohen, ex funcionario de la ciudad en la gestión Ibarra.Según consta en su nombramiento oficial,  Cohen es el que actúa en representación del gobierno de la ciudad y su tarea es la supervisión y  la inspección  de la ejecución del proyecto, la aprobación de  los certificados de obra y de inspección. Sin embargo el 8 de abril pasado el buzo Rodrigo Ojeda cuando estaba trabajando a 30 metros de profundidad y se sintió mal, pero al buscar la  cámara hiperbárica que  por ley debía haber estado allí para equilibrar descompensaciones no la encontró por cuanto salió a la superficie a una velocidad inapropiada, lo que que le provocó una alteración de su flujo sanguíneo por la diferencia de presión atmosférica, su corazón no resistió y falleció pese a los intentos que hicieron los médicos para reanimarlo.Esto estaría documentado en un expediente tramitado en la División de Investigación Penal Administrativa (Dipa) que depende de la Prefectura Naval y en el informe prehospitalario de la empresa de ambulancias que lo atendió en la emergencia.El Juzgado en lo Contencioso Administrativo del Dr. Vicente Cataldo y la Cámara de Apelaciones, exigieron al Gobierno que detuviera la obra, pero la disposición no fue acatada.Existe además falta casi absoluta de medidas de protección laboral. Por este motivo, días atrás el legislador porteño del MST Nueva Izquierda Marcelo Parrilli denunció a  Ángel Rodríguez, a cargo del organismo que le compete esta materia. Según un trascendido,” la idea del Gobierno porteño es avanzar lo más rápido posible y cueste lo que cueste”. Pero hay mas denuncias sobre la obra. El legislador porteño de Diálogo por Buenos Aires, Eduardo Epszteyn presentó un amparo a la justicia porque la empresa Ghella no había contratado un seguro  por daños ambientales, un requisito que está marcado por  Ley. Recién  tomó uno cuando la justicia se lo ordenó, por el período de agosto de 2009 hasta agosto de 2010.En el  Boletín Oficial de la Ciudad de Buenos Aires se publicó una resolución del Ministerio de Desarrollo Urbano de la  cual surge la información que el 7 de julio pasado la empresa señaló que no  renovaría el seguro ambiental por otro año. Ante la exigencia del Gobierno de la ciudad a la Empresa para que se haga cargo de la renovación por un año mas, y la negativa de la firma a hacerlo alegando que  “son costos adicionales excesivos”,el Ejecutivo, por resolución Nº 442 del Ministerio de Desarrollo Urbano decidió  cubrir a la empresa y tomar el seguro a su cargo, produciéndose una curiosa situación en la que el Estado, en este caso, estaría subsidiando a las empresas privadas de la familia.Pero hay más incumplimientos de la Empresa  Ghella que no contrató, según lo establece la ley, antropólogos y paleontólogos para el caso que  si durante las excavaciones se encontraran restos de algún pasado lejano o  mediato, fueran tratados adecuadamente. Durante las obras se encontró un cráneo, lo que motivó que el legislador porteño por el Encuentro Popular para la Victoria y presidente de la Comisión de Derechos Humanos Juan Cabandié impulsara una denuncia judicial para determinar su procedencia. Y así, entre fojas faltantes de un expediente  administrativo que le habían remitido desde el Ejecutivo porteño a pedido del juez Vicente Cataldo y denuncias, la obra sigue adelante Mientras tanto la voz de los vecinos, eternos inundados, se hace oír: Antes de las últimas grandes lluvias de febrero, los buenos augurios del gobierno decían…: «Esta obra terminará con las inundaciones…». Después del desastre, la verdad:… «Con sudestadas no hay solución, dijo el funcionario». Para Adolfo Andrés Rossi, presidente de la Asociación Vecinal «Lago Pacifico» no es una novedad cuando desde hace tiempo vienen anunciando que,” terminados los túneles, en nuestros barrios de Palermo y Villa Crespo, nos seguiremos inundando, como si los túneles no existiesen, como si nunca hubiesen sido construidos, tan inútiles como los cientos de millones de dólares que se hicieron agua hervida”.