La Ley de Comunas Nº 1777 fue promulgada en octubre de 2005, y la Ley de convocatoria a elecciones Nº 3.233 en noviembre de 2009, esta última a instancias del Superior Tribunal de Justicia gracias a la acción llevada adelante por destacados ciudadanos participativos y comprometidos con la lucha comunera. Desde entonces, ni el Poder Ejecutivo ni el Legislativo se ocuparon de reglamentar la Ley Orgánica de Comunas, tampoco realizaron un programa intensivo de difusión y formación pública relacionada con el proceso de descentralización, ni se han hecho campañas de esclarecimiento, ni elaborado un apropiado programa de transferencia de competencias y servicios. Menos aún se impulsó una Ley Electoral que contemple la creación de partidos comunalesLa falta de voluntad política tendiente a hacer fracasar las Comunas es evidente. Los intereses y demandas de los “vecinos” –como suelen denominarnos a los ciudadanos – no forman parte de la agenda de las autoridades políticas de la CABA.El Movimiento Comunero viene denunciando permanentemente estos ardides que el oficialismo y gran parte de la oposición realizan en pos de no darse por enterados de esas demandas, soslayando un proceso serio y responsable de planificación que garantice un adecuado desarrollo de descentralización política y administrativa de la Ciudad.De nada han valido los reclamos realizados por los ciudadanos en el ámbito de la Comisión Bipartita y la Comisión Tripartita.“Vamos a cumplir la Ley”, fue la anodina respuesta del Director de Atención Ciudadana Sr. Juan P. Graña evitando asumir cualquier tipo de compromiso, cuando explícitamente el Sr. Carlos Wilkinson, miembro de la Mesa Organizadora de Interconsejos Comunales, y en su representación, le planteó en el ámbito de la Comisión Tripartita del pasado 18/04/11 si el Poder Ejecutivo que él representaba estaba de acuerdo en que se distingan claramente las elecciones a Jefe de Gobierno y Legisladores de las elecciones a Juntistas Comunales, proponiendo en tal sentido que las Juntas Comunales se elijan mediante boletas separadas a ser introducidas en sobres separados, depositados en urnas separadas y registrados en actas separadas. La evidente indiferencia y desinterés para difundir esta nueva institución de la Ciudad, en contraposición con la “política del marketing” que impone candidatos con técnicas de comercialización exhibidas en enormes carteles que promocionan rostros antes que ideas, con fingidas sonrisas logradas a fuerza de “fotoshop”, es una clara demostración del desvío de recursos al servicio de lo individual y muy por encima del bien común. En vano hemos cifrado algunas expectativas en que favorezcan la participación libre y organizada de los ciudadanos, se pongan al servicio del bien público y actúen responsablemente para cumplir con la obligación que como mandatarios de la ciudadanía les corresponde.Por el contrario modificaron una Ley, estableciendo con carácter de excepción  que la boleta de candidatos para autoridades comunales forme parte integrante de la del candidato a Jefe de Gobierno y a Legisladores, en pocas palabras,  reivindicaron la lista sábana, y lo que es peor, modificaron la Ley de Comunas , que es anterior al llamado a elecciones, por lo que además cambiaron las reglas con las que se debió ir a la primera elección de sus autoridades.Primero nos defendieron del cansancio cívico electoral que implicaba tener una elección a juntistas comunales y otra a Jefe de Gobierno y Legisladores, unificando las fechas. Ahora nos protegen de la fatiga que supone elegir dos boletas diferentes y depositarlas en sobres separados. Los “vecinos” no olvidaremos esta conducta.

MOVIMIENTO COMUNERO