Política

Con la oposición en contra, se aprobó el pliego de Milani

Fue tras un intenso debate, con 39 votos a favor y 30 en contra, cuando la Cámara alta aprobó el pliego de ascenso del jefe del Ejército. La oposición cuestionó la designación de Milani a partir de denuncias presentadas por el CELS, mientras que el kirchnerismo remarcó que no se encuentra procesado por ninguna de las acusaciones y que prima el principio de inocencia.

Milani será el nuevo jefe del Ejército

La Cámara de Senadores de la Nación le brindó ayer su acuerdo para ascender al grado inmediato superior a los jefes de las tres fuerzas armadas y al titular del Estado Mayor Conjunto. 

 

Fue con los votos del Frente para la Victoria y de sus aliados, fueron ascendidos los jefes del Ejército, César Milani, a teniente General; de la Armada, Gastón Erice, a Almirante; de la Fuerza Aérea, Mario Callejo, a brigadier General; y del Estado Mayor Conjunto, Luis María Carena, a general de División. 

 

La oposición, en tanto, cuestionó el pedido de ascenso a Milani a partir de denuncias presentadas por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS). 

 

En ese contexto, el presidente de la Comisión de Acuerdos, Marcelo Guinle, sostuvo que el jefe del Ejército recibió tres ascensos anteriores por acuerdos aprobados por el Senado: en 2001, en 2007 y en 2010. 

 

“Nunca antes hubo cuestionamientos del CELS. Los dos primeros acuerdos se dan sin reparos. En el tercer acuerdo, la oposición plantea las objeciones de su presunto pasado carapintada. Pero no se estaban imputando violaciones a los derechos humanos”, resaltó Guinle. 

 

Mientras el jefe del bloque de senadores kirchneristas, Miguel Ángel Pichetto, defendió el ascenso de Milani argumentando que “se trata de una atribución que tiene la Presidenta como Comandante en Jefe del Ejército”. 

 

“Es cierto que tomamos en cuenta el informe del CELS. Pero este Senado tiene capacidad decisoria. Milani es un militar que fue evaluado en tres oportunidades”, recalcó Pichetto, para luego argumentar que “no está imputado por ningún fiscal” y que “no tiene nada que ocultar”. 

 

Por su parte, Aníbal Fernández, acusó a la oposición por «querer darle una condena sumarísima» a Milani y «fusilarlo en la Plaza de Mayo». «No soy un tarado para votar lo que no tengo que votar», enfatizó, para luego afirmar que «este gobierno se hizo cargo de cada decisión que toma y la presidenta (Cristina Fernández de Kirchner) como Comandante en Jefe de la Fuerzas Armadas decide a quién lleva como jefe del Ejército». 

 

Y el santacruceño Pablo González señaló que «nadie puede cuestionar la vocación de defensa de los derechos humanos de la presidenta». 

 

Como contracara, el ascenso de Milani fue cuestionado por la oposición que sostuvo su negativa a votar el pliego del ahora teniente General blandiendo los informes aportados por el CELS. 

 

El radical Gerardo Morales recordó que Milani «pertenecía al Batallón 141 de La Rioja que fue el epicentro de la represión en esa provincia». 

 

Mientras tanto, el peronista disidente Adolfo Rodríguez Saá indicó que “no se dio ninguna razón para considerar que Milani sea idóneo para recibir el ascenso”. 

 

En tanto, el cordobés del Frente Cívico, Luis Juez, destacó que «por muchísimo menos se le ha bajado el pulgar a otros militares», mientras que el socialista Rubén Giustiniani consideró que “esto es un grave retroceso”.

 

Pero finalmente, el kirchnerismo logró aprobar con 39 votos a favor y 30 en contra el pliego de ascenso de Milani.