El diputado nacional por Proyecto Sur, Fernando Pino Solanas, criticó la posibilidad de que el Ejecutivo vete la ley que obliga a aplicar el 82 por ciento móvil para las jubilaciones y consideró que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner podría pagar “un costo político muy alto” en caso de tomar esa decisión.
“Vetar nada menos que la ley del 82% móvil, que es la reivindicación por la que por décadas vienen luchando el gran sector de la clase pasiva, va a significar para la Presidenta pagar un costo político muy grande”, indicó el legislador y agregó que es “una verdadera vergüenza que la Presidenta considere prioritario pagar a los bancos que nos estafaron y no ajustar el 82% móvil al mínimo salarial”.
Por su parte, la titular del GEN, Margarita Stolbizer señaló que “el veto no es una opción, dada la situación de las jubilaciones» y afirmó que «tal vez, en lugar de hablar de suicidios y caos por esta ley, podrían evaluar girar menos transferencias a grupos concentrados amigos a través de los subsidios».
Para Stolbizer “desde el gobierno hablan de distribuir riqueza pero lo real es que la actividad minera además de depredadora, no paga impuestos y tampoco la renta financiera, claro que en esto último los Kirchner son parte interesada puesto que su fortuna se acrecentó en base a bicicletas y especulaciones; lo que deja en evidencia que la plata debe ser distribuida de mejor forma”.
“La iniciativa fue votada por diputados y senadores de la Nación y está en consonancia con los fallos de la Corte Suprema. Creo que atacar a Cobos o amenazar con el veto, los pone a ellos en situación de okupas y con manifiesto espíritu destituyente”, indicó Stolbizer.
Estas declaraciones se desencadenaron dado que el jefe de Gabinete criticó duramente la ley que aprobó el Congreso, aseguró que llevaría a la quiebra al país y afirmó que Cristina Fernández usará su poder de veto porque no va a permitir que el Estado y los argentinos se suiciden.
En este sentido afirmó que la Presidenta “va a vetar esta ley porque no va a permitir que el Estado y los argentinos se suiciden”.
