El Parlamento griego aprobó hoy el plan de ajuste que exigió el Fondo Monetario Internacional para enviar dinero y así evitar la bancarrota de ese país, mientras en las calles se vivía una nueva jornada de protestas.

Las primeras informaciones sobre la votación entre los 300 diputados de la Cámara en Atenas indica que pese a que tres diputados del partido socialista del Gobierno votaron en contra, una ex miembro de la nueva democracia apoyó el ajuste.

En tanto en las calles miles de manifestantes rechazaban el plan de austeridad y se enfrentaban con la policía, y 155 diputados aprobaban el proyecto y el salvataje.

Los trabajadores continúan sus protestas en una segunda jornada de huelga general que desde esta madrugada ha paralizado el transporte en el país, alterado sus vuelos y afectado la actividad económica.