Política

Planificación desmintió una nota sobre los costos de importación de combustible

El Ministerio de Planificación precisó hoy que el Estado nacional destina 253 millones de dólares por mes en la importación de combustible destinada a las centrales eléctricas y no 330 millones de dólares como informó un diario especializado.

A través de un comunicado de prensa, la Subsecretaría de Coordinación y Control del Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios salió a desmentir los contenidos de la nota «por inexactos y equivocados, ya que en realidad el costo es de 253 millones de dólares por mes, es decir un 25 por ciento menos que lo informado».

La cartera de Planificación salió de esta forma al cruce de una nota publicada ayer en el diario El Cronista, titulada “La importación de energía le cuesta al país u$s 330 millones por mes”.

El parte de prensa precisa que «se importan 1,7 millones de metros cúbicos por año para las centrales eléctricas y no 2,3 como informa El Cronista. Esto implica que el desembolso mensual es de 83 millones de dólares y no 112 millones».

«Del mismo modo, el cupo de gasoil que importan las petroleras para el parque automotor es mucho menor que el indicado por el diario, ya que alcanza los 1,2 millones de metros cúbicos por año y no 2 millones de metros cúbicos como indica el artículo.

Esto también impacta en el cálculo del costo, que es de 59 millones de dólares por mes y no 98 millones», agregá la Subsecretaría.

Remarcaron también que las compras mensuales de LNG (Gas Natural Licuado) «tienen un valor de de 39 millones de dólares y no de 54 millones como señala El Cronista».

En este último caso «el error (de la nota) surge de considerar que el millón de BTU de este combustible cuesta 9,72 dólares cuando en realidad su valor es de 7 dólares».

Por último recordaron que «más allá de los errores respecto al costo y cantidad de la energía importada que contiene el artículo, cabe destacar que las exportaciones (totales) de nuestro país pasaron de 32.000 millones de dólares en 2003 a casi 80.000 en 2010″.

«Por lo tanto, el costo de la importación de energía resulta poco relevante comparado con el gran crecimiento que experimentaron las ventas al exterior, incluyendo productos de alto valor agregado, generando empleo e inclusión social», concluyó el comunicado.