Salta, Misiones, Chaco, Corrientes, Formosa y Jujuy, son las provincias donde más se captan mujeres para la prostitución.

En estos lugares la característica principal es la captación y reclutamiento de personas con fines de explotación sexual y, por otro lado, en su mayoría, las denuncias por desaparición son formuladas por familiares en comisarías y son iniciadas por fugas de hogar.

El mecanismo más utilizados por los secuestradores es a través de un trabajo previo de inteligencia para localizar a las mujeres en la vía pública o simulan ser novios de las víctimas vía Internet (por chat o vía Facebook), y después logran que se escapen con ellos.

En Tucumán, la Fundación María de los Ángeles asiste gratuitamente, de forma integral, a las víctimas de este flagelo social. La entidad está a cargo de Susana Trimarco, madre de Mariota Verón, quien permanece desaparecida el 3 de abril de 2002, secuestrada en San Miguel de Tucumán por una red de trata de personas.

Al respecto una asistente social de la fundación explicó en un medio local que “las chicas rescatadas llegan a la casa hogar y están en un período de dos o tres meses para después ser reinsertadas en sus hogares, con sus familias”.

“Muchas mujeres que son raptadas poseen muchos problemas sociales. En muchos casos, las víctimas son secuestradas de lugares en donde conviven con familiares adictos a las drogas y padres alcohólicos, todo eso genera una preocupación muy grande porque es muy factible que esa persona no se sienta protegida”, reconoció la profesional.

Números que asustan

Por ejemplo en Salta hay treinta causas por el delito de tráfico de personas con fines sexuales y en Jujuy se registran ocho causas iniciadas este año por el tráfico y secuestro extorsivo, con fines sexuales, de personas.

En el caso de Misiones hay, en 2010, veintiocho causas iniciadas por el delito de trata de personas, de las cuales tres culminaron recientemente, mientras que Chaco cuenta con diecinueve casos en proceso de juicio por este delito.