Los edificios y los jardines del Regimiento de Infantería 1 Patricios, ubicados en Palermo, fueron declarados monumento y lugar histórico, por un decreto publicado hoy en el Boletín Oficial, en el que se reseña la historia del Regimiento, que tuvo su bautismo de fuego en las invasiones inglesas.

El decreto, número 1358/2010, publicado hoy en el Boletín Oficial, lleva la firma de la presidenta Cristina Fernández, del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández y el ministro del Interior, Florencio Randazzo.Expresa que se declara lugar histórico nacional al predio y jardines del Regimiento de Infantería 1 “Patricios”, ubicado entre las Avenidas Santa Fe, Luis María Campos y Dorrego, con acceso principal por la Avenida Intendente Bullrich números 475 al 517 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.Incluye además al edificio destinado a alojamiento y oficinas (también denominado Cuartel 1) del Regimiento de Infantería 1 “Patricios”, ubicado entre las Avenidas Santa Fe, Luis María Campos y Dorrego, con acceso principal por la Avenida Intendente Bullrich números 475 al 517 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. También comprende los edificios destinados a alojamiento y oficinas (también denominado Cuartel 2), a concina de tropa, la Capilla, y los destinados a Sanitarios, talleres, el destinado al Salón Patricios, el puesto de seguridad, el pabellón del Centenario (antiguo Pabellón de Fiestas, Correo y Telégrafos), los dos edificios pertenecientes al Estado Mayor, otro destinado a parque automotor, el destinado a gimnasio, las caballerizas y el taller automotor.Se instruye a la Comisión Nacional de Museos y de Monumentos y Lugares Históricos a suscribir con el Ministerio de Defensa con fines patrióticos que establezca los alcances y niveles de protección de las declaratorias contenidas en el Decreto.En los considerandos expresa que se tomó el expediente de la Secretaría de Cultura por el que se propone la declaratoria de diversos edificios de dicho regimiento.Recuerdas que luego de la Reconquista de Buenos Aires de manos de los invasores británicos, el Comandante de Armas de la ciudad, Capitán de Navío don Santiago de Liniers lanzó una proclama instando a formar cuerpos armados para la defensa, previendo una nueva incursión enemiga. La convocatoria tuvo una respuesta entusiasta por parte de los vecinos, especialmente de los criollos, que reunieron la tropa más numerosa —tres batallones— agrupados en la Legión de Patricios Voluntarios Urbanos de Buenos Ayres.La Legión —antecedente del Regimiento de Infantería 1 “Patricios”- creada el 15 de septiembre de 1806 bajo el mando de don Cornelio Saavedra, tuvo su bautismo de fuego el 5 de julio de 1807, en ocasión de la segunda invasión inglesa, y libró más de cincuenta batallas y combates a lo largo de nuestra historia.Los Patricios integraron las expediciones enviadas por Buenos Aires al interior del país para consolidar la Revolución de Mayo; fueron testigos —a las órdenes del entonces coronel Manuel Belgrano— del primer enarbolamiento de la Bandera el 27 de febrero de 1812; participaron en la guerra contra el Imperio del Brasil, combatieron en la Vuelta de Obligado, la Guerra de la Triple Alianza, la Campaña al desierto y la Guerra de Malvinas.El 28 de junio de 1913 el Regimiento se instaló en el predio de Palermo, ocupando los galpones de chapa que habían quedado en desuso una vez finalizadas las exposiciones realizadas con motivo del Centenario de la Revolución de Mayo.La construcción de los nuevos cuarteles del Regimiento —realizados por el ingeniero civil Alberto Barvie bajo el proyecto general del arquitecto Isaac Thosndike— se inició en el año 1927 y concluyó en el año 1932. Debido al anegamiento de los terrenos y a la proximidad del arroyo Maldonado. se utilizó un sistema nervurado —uno de los primeros en su tipo— para anclar los cimientos sobre los cuales se construyeron los contrapisos.El conjunto ha conservado las proporciones entre los espacios abiertos y los construidos —donde priman las disposiciones axiales de los pabellones— la distribución de circulaciones de distinta jerarquía, vehiculares y peatonales, y las plazas a partir de las cuales se organizan los diversos edificios.Los jardines, en líneas generales, mantienen la composición de origen, con especies arbóreas de larga data cuyo crecimiento les otorga gran calidad paisajística.