Camerón así salió al cruce de un artículo publicado en el diario La Nación, titulado «Pese a la restricción de dólares, el Gobierno importó más gas del que se necesitaba», en referencia a que por un supuesto error se habrían adquirido barcos de GNL que el sistema no requería. «En ningún caso se efectuaron compras de gas que no eran necesarias», señaló el funcionario. «No existió ningún error de cálculo, por el contrario la planificación anual que realizamos se va modificando y actualizando atento a la evolución de diferentes factores como el clima y los niveles de producción local de combustibles», detalló Cameron. Al respecto, Cameron destaco que «la reparación de la refinería que YPF tiene en Ensenada, que había sido seriamente afectada por un incendio luego del temporal del 2 de abril, pudo realizarse en un lapso menor al previsto por el denodado esfuerzo de la empresa, que hizo posible un incremento de la producción de fueloil, incluso a niveles superiores a los previos al incidente, a lo que debe sumarse que las temperaturas medias fueron menores a las habituales para esa época del año». Por lo tanto, el secretario considero que «es un disparate lo que plantea el artículo porque si se canceló la entrega de GNL y se reprogramó para más adelante, nunca existieron esas compras que califican de innecesarias y por lo tanto la noticia debería ser que  no hay  ninguna noticia». También agregó que «el Estado Nacional, a través de una operatoria coordinada entre Compañía Administradora del Mercado Eléctrico Mayorista (CAMMESA), la petrolera estatal ENARSA e YPF, que es la encargada de realizar las compras, planifican la provisión anual de combustibles y reprograman cuando es necesario para que el gas esté siempre garantizado».