El candidato a jefe de Gobierno de la Ciudad por Proyecto Sur, Fernando “Pino” Solanas, rechazó por “lamentable” el proyecto del macrismo para restringir el salario de los representantes de las Comunas y sostuvo que las elecciones de julio son “un referéndum” para los porteños “para reafirmar la independencia y la autonomía” del distrito.
“Queremos un Gobierno de unidad para la Ciudad, no somos una fuerza sectaria, ni cerrada”, aseguró Solanas en declaraciones hechas en la Legislatura durante el ciclo de conferencias con los postulantes a competir en el distrito, organizado por el Círculo de Periodistas porteño y la Fundación Konrad Adenauer.
En ese marco, el dirigente de Proyecto Sur planteó los tres ejes de su campaña relacionados con la lucha contra la desigualdad, la defensa del medio ambiente a través de un plan denominado “Buenos Aires Verdes” y la incorporación del vecino en la gestión a través de las Comunas, cuyas autoridades serán elegidas en coincidencia con los comicios de jefe y vice de Gobierno y legisladores.
Al respecto, repudió el proyecto que la semana pasada envió el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, a la Legislatura, que propone la eliminación del sueldo de seis de los siete comuneros, dejando sólo vigente la remuneración del presidente de la Junta, y restringe las funciones de las nuevas unidades de gestión en el manejo de los presupuestos y de la ejecución de obras en los barrios.
En estete sentido consideró “lamentable ese proyecto porque evidencia la mentalidad del macrismo de impedir la democratización de la Ciudad”, y resaltó que el modelo de las Comunas implica “el criterio de democracia participativa porque incorpora al vecino a la transformación en el distrito”.
Asimismo Pino planteó que “el 10 de julio es un nuevo referéndum, una convocatoria popular, una cita de honor a los ciudadanos para reafirmar la independencia y la autonomía de la Ciudad y el rescate de todas las jurisdicciones”.
Finalmente atacó a Macro indicando “que no se puede concebir un derroche impúdico de campañas publicitarias” y se comprometió, en caso de ganar, a construir “2.500 viviendas por año de gobierno, es decir, diez mil en los cuatro años; y diez mil más a través de créditos bancarios”.
