El debate que planteé giraba sobre la decisión de Mauricio Macri de autorizar que oficiales de la Policía Metropolitana realicen cursos sobre anti-terrorismo diseñados por el Western Hemisphere Institute for Security Cooperation (WHINSEC) ubicado en la mayor base militar del sur de Estados Unidos.  Macri sabe que la Policía Metropolitana no tiene potestad para actuar en temas vinculados al terrorismo. Los temas tales como el tránsito no requieren, en una sociedad democrática de expertos en tácticas y procedimientos de combate al terrorismo.   Obviamente, como ocurrió con el nombramiento del comisario Palacios, Macri aspira a contar con una fuerza de choque represora y capacitada para actividades de inteligencia. Todo muy lejos de la ley que creó su Polícía.   Tal vez la gente debería saber que el Presidente Néstor Kirchner en 2006 prohibió que miembros del Ejército y de la Policía Federal atiendan las sucesoras de la School of the Americas.   También Uruguay y otros países tomaron la misma iniciativa teniendo en cuenta que desde esa institución se «graduaron» violadores de los derechos humanos como Leopoldo Galtieri, Roberto Viola, Hugo Banzer, Manuel Noriega y Vladimiro Montesinos.   Peor aún, más recientemente pasó por sus aulas el general Romeo Vásquez Velásquez involucrado en el golpe en Honduras.   Muchos estadounidenses, defensores de los derechos humanos han reclamado el cierre definitivo de esta Escuela de Seguridad donde dictan cursos contra el «terrorismo».   Por ejemplo más de 100 legisladores se sumaron a la enmienda que en 2007 se presentó como ley del Congreso para cerrar inmediatamente la institución.   Inclusive, el congresista Jim McGovern propuso que Estados Unidos adopte los planes de estudio de los Institutos militares Argentinos por su excelencia en temas de legalidad y derechos humanos.   El congresista Joseph Kennedy declaró en el recinto del Congreso que «La Escuela de las Américas es una institución que ha instruído más dictadores que ninguna escuela del mundo».   El debate que yo planteo y que La Nación desvirtúa no es sobre los intereses de Estados Unidos. Ellos saben defenderlos muy bien sin necesidad de dicho diario.   El debate era por qué y para qué Mauricio Macri necesita entrenar tropas de una policía metropolitana en tácticas represivas que la ley no le autoriza a aplicar.   Eso es todo.