Sociedad

“Tenemos que seguir trabajando para que no haya más discriminación y violencia”

En esta entrevista exclusiva con El Mensajero Diario, María Rachid habla sobre la Iglesia Católica, la discriminación y todos los derechos que se consiguieron, en términos de diversidad sexual, en estos últimos años.

La Fulana nació para contener a mujeres que quedaban en situación de calle.

Por Anabel Acevedo Rachid es una de las principales luchadoras por los de los derechos de la diversidad sexual. Creadora de La Fulana, el primer centro de contención para mujeres lesbianas, y de la Federación Argentina LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans). En esta entrevista exclusiva con El Mensajero Diario, habla sobre la iglesia católica, la discriminación y todos los derechos que se consiguieron, en términos de diversidad sexual, en estos últimos años. También profundiza sobre las trabas del macrismo, y que el jefe de estado solo apoya aquellos de intereses inmobiliarios.       Estás con varios proyectos como el voto extranjero y la legalización del cannabis. ¿Cómo viene el tratamiento de estos temas?   Desde el Movimiento por la Igualdad trabajamos con distintas agrupaciones y movimientos sociales, la mayoría son de personas vulneradas por distintos tipos de discriminaciones y en ese sentido hemos presentado muchos proyectos. Cuando comenzó a tratarse la reforma política acá en la Legislatura de Buenos Aires, habíamos logrado que empezara a tratarse el proyecto de voto de personas migrantes pero, lamentablemente, no se llegó a votar. También pasó lo mismo en el Congreso de la Nación. Nosotros impulsamos que se debata el proyecto que está presentado en ese sentido, junto al voto joven pero todavía queda pendiente el voto de los migrantes que en Argentina pueden votar pero para hacerlo tienen que empadronarse y hacer  todo un trámite que en realidad no debería ser necesario. La gente cuando ya tiene su DNI en Argentina como residente ya debería poder acceder a su derecho al voto. Estamos trabajando en otras propuestas: llevamos el debate del derecho al aborto, el debate de la legalización de drogas, del cannabis. Además, estamos proponiendo otras leyes de niños y jóvenes: nos preocupa la discriminación en la matriculación en las escuelas, por el pago o no de las cuotas escolares. La propuesta de ley que hicimos en la Comisión de Educación -que nunca llegó a ser tratada- proponíamos que los pagos de la cuota de los colegios privados sean confidenciales, solo reservadas a las personas administrativas que trabajan en el colegio y que no circule en las familias. Porque eso produce discriminación, estigmatización. Hicimos una propuesta de ley de acoso escolar que tampoco llegó a ser tratada que propone una iniciativa en las escuelas y esperamos que se trata el próximo año. Tenemos más de 200 proyectos en la Ciudad de Buenos Aires y cerca de ocho a nivel nacional porque, a veces, con las mismas organizaciones y equipos que trabajamos en un proyecto que nos parece que no puede ser solucionado en la Ciudad de Buenos Aires y nos parece que tiene que ser tratado a nivel nacional, entonces hacemos un proyecto nacional y lo metemos en el congreso por mesa de entrada o hablamos con algún diputado o diputada que le interese nuestro proyecto para trabajarlos en conjunto como ha sido en el caso de muchos proyectos con la diputada Araceli   Ferreyra.       Me decías que muchos proyectos no pudieron ser tratados. ¿Esto tiene que ver con el funcionamiento de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires?   Si, están prácticamente inhabilitados los proyectos. No llegan a presentarse en las comisiones, muchas de las comisiones no se reúnen, he formado parte de comisiones en la legislatura que no han tenido más de dos reuniones en un año. Los proyectos no se tratan, no se respeta el reglamento interno, tratan los proyectos que quieren y en el orden que quieren. Se modifica el reglamento para que no se pueda dictaminar en minoría cuando cualquier legislatura de provincia o el país pueden dictaminar en minoría las comisiones. Esto hace que las comisiones prácticamente no funcionen. Cuando llegamos al recinto con algún proyecto es muy difícil con el Pro pero una vez que se logra el reglamento no se publican para que entre en vigencia la ley o no se reglamenta por parte del poder ejecutivo o en el peor de los casos se veta. Eso hace que la legislatura esté prácticamente inhabilitada, salvo para los negocios inmobiliarios del Pro o cuestiones muy operativas como hacer poner un semáforo o cambiar el nombre de una plazoleta o declarar el profundo pesar de la legislatura por algún fallecimiento o alguna persona destacada de algún ámbito; salvo estas cuestiones no se pueden resolver problemas de fondo de la ciudad. De hecho hemos presentado iniciativas en todos los temas, incluso en temas de seguridad que creemos que se puede avanzar en la protección de los ciudadanos. Pero nunca han sido tratadas en la Comisión de Seguridad de la legislatura. Hay legisladores del Pro que han presentados proyectos muy interesantes en materia de seguridad, derechos humanos, educación que tampoco han sido tratados.       Varios legisladores señalan el mismo inconveniente con el Pro. ¿Cómo se hace para seguir ante estas trabas?   Hay que insistir en que el poder legislativo funcione y eso es lo que estamos haciendo todo el tiempo. Más allá de eso, nosotros hemos pedido por ejemplo que la comisión de centralización funcione, lo hemos pedido por nota, mail, Facebook, Twitter y no se reunió más de dos veces en el año. Cuando tenemos que resolver un problema urgente, los legisladores acudimos a la justicia porque sabemos que la legislatura no lo va a resolver. El tema del Guido Spano, señala todo un problema jurídico que tiene que resolver la Legislatura de Buenos Aires que es el problema con los colegios privados. No puede ser que cierre como si fuera cualquier empresa dejando chicos sin colegio de un día para el otro. Estamos elaborando todo un protocolo para explicar cómo debe ser el cierre de un colegio privado. Colaboramos en resolver el problema concreto como la creación de la cooperativa del Guido Spano, presentamos un amparo en la justicia para que resuelve las cuestiones más inmediatas, vemos los caminos para resolver los conflictos y activamos todos pero sabemos que el legislativo es el más difícil porque a pesar de todo el discurso republicano, el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, del respeto de los tres poderes, de la democracia y el dialogo, lamentablemente, él tiene inhabilitados los poderes de la Ciudad de buenos Aires.       Hace unos días, el Arzobispado de Rosario criticó al padre Ignacio por hacer un programa especial de Navidad en la TV, en dónde invitó a parejas homosexuales ¿qué opinas de la reacción de la iglesia católica?   La jerarquía de la iglesia católica siempre ha hecho y continua haciendo un profundo rechazo y discriminación a las parejas y familias conformadas por el mismo sexo asique no me sorprende. Tampoco me sorprende la actitud del padre Ignacio porque hay sacerdotes que han sostenido una actitud abierta incluso durante la campaña de matrimonio igualitario, que  se han expresado a favor y lo han apoyado pero la jerarquía de la iglesia católica -en aquel momento al frente de Bergoglio- ha sido castigar a estos sacerdotes que se manifiestan a favor del matrimonio igualitario.       ¿En algún momento podría cambiar la visión de la iglesia?   Creo que hay muchas cosas de la jerarquía de la iglesia católica que deberían cambiar, no solamente la posición con respecto al matrimonio igualitario y la homosexualidad en general. Sino la posición respecto del rol de las mujeres, el derecho de la decisión sobre su propio cuerpo; hay muchas cosas que la iglesia católica se ha quedado en la prehistoria. Además, va en contra de sus propios fieles la mayoría de los católicos está de acuerdo en el uso de preservativos para prevenir embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual; con el uso de anticonceptivos y con el matrimonio igualitario. La jerarquía de la iglesia católica debe cambiar profundamente todo lo que dice y hace, porque genera mucho dolor, sufrimiento y muertes en todo el mundo; producto de sus posiciones.   ¿Por qué creaste la Fulana y seguiste por este camino de lucha para conseguir tantos derechos?   Es algo personal. Cuando yo me asumo como mujer lesbiana me doy cuenta que hay muchos derechos que no tenemos. Que había situaciones de discriminación que había que enfrentar y como militante -que me considero de toda la vida- me acerqué a las organizaciones para trabajar con esto. Empecé a trabajar con asociaciones de mujeres lesbianas y bisexuales, con asociaciones de diversidad sexual y ahí fue que se nos ocurrió formar La Fulana. En ese momento éramos un grupo de mujeres muy jóvenes que  veíamos que compañeras nuestras que hablaban con edad temprana con sus padres y quedaban en la calle producto del rechazo de su propia familia, entonces creamos un lugar de contención, para vivir y dormir. Abrimos el centro comunitario con asistencia psicológica y jurídica. Se fue ampliando, las cuestiones que las llevaban a vivir eran diversas a fines de los ´90s y 2000 y albergó a cientos de mujeres por distintos motivos y a algunos varones también -pero ellos tienen más refugios en la ciudad por situaciones de calle que las mujeres-. La Fulana se contactó con diferentes agrupaciones es parte del movimiento mujeres, diversidad sexual y fundamos con otras organizaciones la LGBT que tenía uno de los objetivo como matrimonio igualitario con adopción, igualdad de género y algunos objetivo más que hoy son más de 66 organizaciones del país. Casi todos los objetivos que hicimos en esa acta constitutiva ya se han cumplido. Se derogaron todos los artículos que criminalizaban la homosexualidad en más de 16 provincias en aquel entonces, en el 2006, con la colaboración de quien era Jefe de Gabinete,  Aníbal Fernández y otros legisladores. Logramos que se incluyan los materiales de educación sexual, con los temas de diversidad sexual tratados de manera abierta, correcta y amplia. Y queda pendiente una ley antidiscriminatoria.       A nivel sociedad ¿Hubo un cambio con la aprobación de las leyes desde fines de los ´90s a hoy?   Si. La sociedad cambió muchísimo y eso facilitó la ley de la aprobación del matrimonio igualitario, la ley de identidad de género. Y creo que a partir de la aprobación de estas leyes, generan cambios culturales más profundos, que posibilitan los cambios legales y estos ayudan a seguir generando los cambios culturales que son los más importantes. Nosotros siempre decimos la igualdad jurídica es muy importante, es una herramienta fundamental para seguir trabajando por la igualdad social, además de los derechos concretos que también son importantísimos para la vida de las personas. Si uno no parte desde la igualdad jurídica es muy difícil. Todavía tenemos que seguir trabajando por la igualdad las mujeres, de oportunidades y sociales. Pero sin la igualdad jurídica sería imposible. En estos últimos años fue lograda pero ahora tenemos que seguir trabajando por la igualdad social y para que no haya más discriminación y violencia.       ¿Qué país te gustaría para los jóvenes que vienen?   Un país donde los jóvenes puedan acceder a todos sus derechos, libres y construir un país cada vez mejor para las generaciones que vienen.       Perfil de María   Música: Sabina, Mica, Calle 13   Libro: Estoy leyendo “Economía a contramano” de Zaiat.   Frase: “Conducir es persuadir, no mandar” (Perón).   Red social: Facebook es más linda permite una comunicación más profunda. Twitter es una despersonalización, la gente es más despiadada e impulsiva (capaz que la gente es más como twitter).