El titular de la UCR, Ernesto Sanz, se refirió a la crisis por la que atraviesa el sector automotriz y señaló que “un 40% menos de autos vendidos impacta directamente en autopartistas, concesionarias, pequeños y medianos proveedores de fábricas”, explicó el referente del Frente Amplio UNEN y añadió “a largo plazo, repercutirá en toda la cadena de servicios vinculados al automotor”.

“Usaron a la industria más importante que tiene el país como factor de ajuste, quisieron rascar los bolsillos de las automotrices para recaudar más y terminaron de desplomar al sector”, denunció Sanz y agregó “este es un problema que generó el gobierno y debe asumir sus responsabilidades y resolverlo con urgencia”.

Sanz explicó que “el desplome de la industria automotriz es una muestra de tres fracasos del gobierno. El primero fue una la relación comercial con Brasil que minada de trabas y conflictos afectó la industria y el comercio de autos. El segundo, la enorme caída del poder adquisitivo de los argentinos que, devaluación mediante, deshizo las posibilidades de acceder a vehículos nuevos y, por último, el impuestazo a los autos de alta gama que en lugar de servir para recaudar y frenar la sangría de dólares, destruyó puestos de trabajo y complicó a la industria nacional”.

“Sube el tomate, el gobierno pide que bajen los precios, sube el cemento, el gobierno pide que bajen los precios, suben los autos, el gobierno pide que bajen los precios. Esto es patético”, resaltó el senador mendocino y añadió: “Necesitamos soluciones más que voluntarismo ineficaz”.