Gabriela Roldán, la hermana de la policía cordobesa que presuntamente se suicidó en septiembre último, afirmó que a Damaris “la mató la narcopolicía». Dijo además que «los responsables de la muerte son los que hoy están presos en Bouwer», en referencia a los altos jefes de la fuerza sospechados de vínculos con una red de narcotráfico.