El ex jefe de Inteligencia santiagueño, Musa Azar, y el subjefe de tal dependencia, Miguel Tomás Garbi, fueron condenados a prisión perpetua por aberrantes delitos. En tanto, otros 6 represores recibieron penas más bajas, lo que generó el descontento de familiares y militantes de organizaciones de derechos humanos. El Tribunal anunció que ahora investigan a un cura y civiles.
SANTIAGO DEL ESTERO