Mientras millones lloran la muerte de Diego Maradona, el mejor futbolista del mundo que se convirtió en ídolo popular por no olvidarse jamás de su rebeldía contra el poder y la desigualdad; el Jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, perteneciente a la alianza Cambiemos que en reiteradas y sistemáticas ocasiones ha demostrado su desprecio a la cultura popular, a las personas más vulnerables, que hoy componen más del 40% de la población por el incremento de la pobreza en el país tras la crisis económica que ha iniciado el ex mandatario Mauricio Macri, de misma filiación política que Larreta, cuatro años atrás; decidió enviar a la Policía de la Ciudad a reprimir a las personas que pacíficamente formaban fila desde la madrugada de ayer para poder entrar a la Casa Rosada a despedir a Maradona.
En horas del mediodía, alrededor de las 14 horas, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires cortó el ingreso principal a Plaza de Mayo, y por tanto también a Casa de Gobierno, donde se encuentra el féretro de “el Diego” al que la gente se acercó a despedir desde diversos puntos de la Ciudad y provincia de Buenos Aires. La justificación que dieron los agentes al cerrar el acceso fue que a partir de las 16 horas el servicio funebre terminaría y las miles de personas que formaban fila hasta Plaza Constitución quedarían sin poder siquiera acercarse a Plaza de Mayo. Ante las obvias protestas de las familias enteras, grupos de amigos, viejos, chicos, e hinchas de diversos clubes que se acercaron a despedir al futbolista, la Policía no tuvo mejor idea que reprimir con golpes, corridas, gases lacrimógenos y balas de goma a todos los presentes sin siquiera fijarse en las y los niños pequeños y personas mayores que había en el lugar.
La terrible escena desencadenó aún más angustia masiva, ya que Diego Maradona apoyaba a las personas mas humildes, defendía a las y los trabajadores y se posicionaba políticamente en contra de Larreta, Macri y la alianza Cambiemos en general. Los ramos de flores y las muestras de cariño que llevaban las personas pisoteadas por la policía entre gritos y llantos, es una foto grabada a fuego en la retina popular, que en un momento de vulnerabilidad en medio de uno de los años más difíciles para el mundo, en vez de recibir contención, volvió a recibir balas del Gobierno Porteño.
Si bien sigue la tensión con la policía y muchos terminaron heridos por las corridas en medio de uno de los velorios más grandes del país, el dolor y la devoción por el ídolo popular llevó a la gente a permanecer en el lugar. Si bien no se sabe aún cuántos podrán entrar a despedir unos pocos segundos el cuerpo de Diego Armando Maradona, que se encuentra en el lugar desde las 6 de la mañana; luego de la represión hace instantes, circuló la información de que se extendió hasta las 19hs la despedida, para que todas las personas que quedaron dentro del perímetro delimitado hasta Avenida de Mayo y Bernardo de Irigoyen, puedan ingresar al Salón de los Patriotas.
