Fabricio Oberto confirmó en una conferencia de prensa en Córdoba, su retiro definitivo de la práctica profesional del básquet.  Lo hizo tras regresar a la Argentina procedente de Estados Unidos, donde fuera compañero de Emanuel Ginóbili en el  San Antonio Spurs campeón. “Esto fue algo muy duro para mí, por momentos demasiado duro” confesó Oberto a los medios. 

El campeón olímpico recordó el momento en que decidió dejar el básquet: “en el entretiempo del partido ante Milwaukee me sentí mareado y débil. En eso se me acercó un asistente del técnico y me dijo que estaba pálido. Ahí reconocí que me sentía mal. Ya alguna vez, cuando jugaba en los Spurs, lo había ocultado. Esta vez me llevaron con los médicos y no salí para la segunda parte. Antes de tener los estudios ya tenía madurada la decisión: no jugaba más”. 

En relación a su futuro no tiene definido aun que actividad desarrollará, aunque desea seguir vinculado al básquet: “espero seguir en el básquet, porque será muy difícil alejarse de este ámbito. Creo que de alguna manera estaré ligado a él. Pero ya lo veré en el momento adecuado. Me han dicho que lo que aprendí debo transmitirlo, pero hay que tener pasta para hacerlo. Veremos para qué lado sale todo lo que sé”.

Por último, agregó: «Irme así no quiere decir que mi final no sea feliz, no me puedo quejar de nada de lo que me pasó en el básquet.»