El priísta Carlos Jiménez Macías dijo que es un hecho que los sectores «duros» del gobierno de Barack Obama presionan porque consideran que la escalada de violencia en la frontera con México pone en riesgo su seguridad nacional y quieren medidas similares a las contenidas en el Plan Colombia.
Por ello, recalcó, el Senado deberá estar alerta, dada la coyuntura actual y la «vocación intervencionista» del vecino país del norte.
Por separado, el coordinador de los senadores del PT, Ricardo Monreal, dijo que los casi 30 mil muertos provocados por los cárteles de la droga son «la pantalla» y el motivo para un nuevo intervencionismo de Estados Unidos, que insiste en apropiarse de espacios territoriales mediante el establecimiento de bases militares.
Hizo notar que el reporte de The Wall Street Journal va en el sentido de que el Comando Norte analiza qué otros recursos se pueden llevar a cabo contra los cárteles de la droga en México.
Monreal resaltó que es evidente que el presidente Felipe Calderón no ha defendido la soberanía nacional, y luego de la segunda reunión del Grupo de Alto Nivel de la Iniciativa Mérida, el 23 de marzo pasado, Estados Unidos incrementó la militarización de la frontera con México.
Todo indica, agregó, que el gobierno mexicano ha aceptado una injerencia cada vez más activa de integrantes de agencias estadunidenses, como la DEA, en el combate al narcotráfico y a otras expresiones de la delincuencia organizada.