«Es una actitud caprichosa y malintencionada del gremio que no tiene otra intencionalidad que generar malestar entre la gente», dijo el funcionario en declaraciones a radio La Red, en las que agregó que la medida «no tiene ninguna racionalidad ni explicación».

Ramos defendió las medidas adoptadas por el Gobierno en materia de controles a los maquinistas, dijo que «no tienen otro objetivo que cuidar a la gente y a los mismos trabajadores» y sostuvo que «no vamos a dar un solo paso atrás».

«Necesitamos del acompañamiento, la responsabilidad y la buena fe de los trabajadores de los trenes», pidió Ramos y no descartó que se apliquen sanciones para los maquinistas que realizan hoy la medida de fuerza.

El secretario responsabilizó a los maquinistas de tener «una actitud caprichosa y de lobby para seguir manteniendo un poder, y no dar seguridad a los usuarios» y dijo que «cada uno se tiene que hacer cargo de lo que corresponde».

Por último, Ramos destacó que el Estado nacional «como nunca está realizando una inversión histórica en materia ferroviaria».