Argentina cumplió anoche su mejor actuación ante el rival más accesible que le tocó enfrentar en la Copa América, goleó por 3 a 0 al combinao sub 22 de Costa Rica. Ahora espera por el segundo del Grupo C, que se definirá entre Perú, Uruguay o Chile.

El seleccionado nacional tuvo una buena tarea, principalmente sostenido por el trabajo de recuperación de Fernando Gago y la gran actuación de Lionel Messi quien se desempeñó como enganche, asistiendo a los goleadores en los dos últimos tantos y generando la mayoría de las situaciones de peligro del equipo argentino.

Costa Rica se supo inferior y esperó con mucha gente en el fondo, lo que complicó la generación de juego del equipo nacional en los primeros minutos. Sin embargo, Argentina comenzó a llegar por el propio peso del empuje y la acumulación de jugadores ofensivos.

No estuvo preciso Gonzalo Higuaín (tuvo tres claras, sólo una fue al arco y la rechazó el arquero) y tampoco Sergio Agüero, quien encontraría el gol en la última del primer tiempo al recoger el rebote del arquero después de un disparo de Gago.

Al gol oportuno se le sumó la actitud ofensiva en el comienzo de la segunda etapa, en la que Argentina encontró rápidamente el segundo, a los 18, tras un pase perfecto de Messi para Agüero, quien definió bien de derecha.

El equipo de Sergio Batista siguó apretando para liquidar el partido y lo consiguió con la misma fórmula: asistencia de Messi, definición fuerte de Di María. Con el tercer gol se «terminó» el partido, Argentina reguló y esperó el final ante un limitado equipo costarricense que hizo lo que pudo.

Si bien se logró la victoria esperada y con una diferencia lógica, se vio a un equipo con dos caras, muy ofensivo pero desbalanceado atrás, con varias lagunas entre los mediocampistas y los defensores. Prueba de ello fueron las repetidas faltas, principalmente en el primer tiempo, de Milito, Mascherano y Zanetti.

El partido de cuartos tendrá diferentes matices de acuerdo al rival que toque. Se verá si esta formación puede repetirse ante selecciones con más vocación ofensiva. Es seguro que Gago y Agüero seguirán siendo titulares y que Messi jugará donde mejor sabe hacerlo, por algo lleva la 10 en la espalda.