El sargento Pedro Ticona, uno de los dirigentes de la Asociación Nacional de Sargentos, Suboficiales, Clases y Policías (Anssclapol) confirmó hoy que en la reunión se analizan soluciones a sus demandas que, en principio, habían sido rechazadas por el gobierno. Los agentes reclaman que el salario básico del sector se nivele en una suma mínima equivalente a 301 dólares y, además, se lo fusione con un bono de 57,4 dólares que reciben cada mes, reportó la agencia EFE. Pese a las protesas en varias unidades policiales de los nueve departamentos del país, hay otras que trabajan con normalidad, como una brigada que seguridad a los bancos. El jefe de la Unidad de Atención de Conflictos de la Defensoría del Pueblo, Gregorio Lanza, dijo a la agencia estatal ABI que la entidad hizo gestiones para lograr el reinicio del diálogo que se produjo hoy. «La Defensoría del Pueblo valora profundamente que se hayan abierto nuevamente las condiciones del diálogo y creo que es un signo de madurez de ambas partes», precisó. La diferencia radica en que para el gobierno los posibles incrementos debían ser considerados en el presupuesto para el próximo año, mientras que los agentes consideraban que el acuerdo debía darse por hecho en este ejercicio. El gobierno calificó el lunes como «injusta» la protesta porque, según ha destacado, hizo varios esfuerzos para mejorar las condiciones materiales de los 36.602 agentes que hay en todo el país. Asimismo, sostuvo que entre 2006 y 2013, bajo la Presidencia de Evo Morales, el presupuesto para salarios de la Policía creció en un 172 por ciento frente a lo registrado en los ocho años previos. Según el Gobierno, los agentes tuvieron aumentos salariales que estuvieron por encima de los índices de inflación, una asignación alimentaria mejorada y mejores condiciones para su trabajo. El aumento salarial para 2014 es de un 10 por ciento, superior al 6,5 por ciento de inflación registrado el año pasado. Según las autoridades, la demanda de fusionar un bono al salario básico tendrá un efecto para las arcas del Estado de un gasto adicional equivalente a 23 millones de dólares anuales, una cifra que subirá gradualmente cada año por el crecimiento vegetativo de esa fuerza de seguridad.
Fuente: Telam