Política

“Caminábamos por el filo de la navaja”

Adrián Rodolfo Camps es miembro de la Comisión Ejecutiva del Comité Nacional, Secretario de Finanzas y Apoderado del Partido Socialista Auténtico. A fin de año terminó su mandato como legislador de la Ciudad de Buenos Aires por Proyecto Sur. Además es Ingeniero en Electrónica, especialista en Electromedicina.

"La democracia es uno de los ideales cumplidos", señala Camps.

Por Anabel Acevedo   En esta entrevista con El Mensajero Diario opina sobre la situación actual del país y del desconocimiento de la ciudadanía en relación al rol del legislador. Cuenta sobre los proyectos que pudo cumplir como legislador. Además, recuerda cómo vivió la última dictadura militar y destaca el valor que tiene la democracia.   ¿Qué te dejó el paso por la legislatura porteña? Estamos muy conformes con nuestra gestión, desgraciadamente no pude renovar la banca. Hablo de nosotros porque tenía muy buenos asesores en Ambiente, Espacio Público y Planeamiento Urbano. Conseguimos la aprobación de leyes muy importantes como la Reserva Ecológica de la costanera norte, la urbanización del lago Lugano, los carteles en braille de las paradas de colectivo, la rezonificación del barrio de flores. Además trabajamos en leyes que no eran de nuestra autoría, en contra de la construcción de torres en Villa Pueyrredón y Villa del Parque, lo que nos valió el reconocimiento de muchos vecinos. Es muy difícil hacer política en la Ciudad de Buenos Aires, desde el punto de vista de los legisladores, la gente no sabe quiénes son y no conoce su tarea. Nosotros hicimos una encuesta para que los ciudadanos nos pudieran nombrar un legislador; el 83% no pudo contestar la pregunta o identificar uno de los 60, contestaban nombres de diputados nacionales o de otros legisladores que ya no estaban. Así, realmente, es muy difícil hacer política porque el ciudadano no se involucra, no controla la labor de los legisladores. No saben lo que votan, no saben de los acuerdos que hacen internamente, que muchas veces los perjudica. La postulación o reelección siempre depende de integrar listas donde hay figuras atractivas, mediáticas, conocidas y entonces la política se degrada.   ¿En base al estudio pensaron en hacer algo a  futuro para concientizar a la gente del rol que cumple un legislador? No es un problema de concientización. En el año 2001 hubo un quiebre de la política y la sociedad,  la gente dejó de creer en los partidos políticos y en los dirigentes, con justa razón. Eso perjudicó mucho a los que queremos hacer política de otra manera. Siempre existe la idea de que los políticos son corruptos, que no trabajan. Si hay alguien que quiere realmente trabajar no hay forma de que eso trascienda porque no hay un ida y vuelta con la ciudadanía, entonces después, salvo excepciones, termina votando al que le vende mejor su propaganda por televisión o el que es más simpático o el que va al programa de Tinelli. Me parece que eso es muy difícil de revertir.   Algunos proyectos que tenían los pudieron cumplir ¿Sentiste muchas trabas en la legislatura o podían avanzar? Tuve trabas en algunos proyectos y en otros no. El de la Reserva Ecológica costó mucho porque los terrenos son de propiedad de la Universidad de Buenos Aires y se requería de un acuerdo entre la UBA y el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Pero grandes trabas no he tenido, eso depende de la forma que uno tenga de manejarse con respecto a los demás bloques. Cuando llegaba algún legislador nuevo del bloque nuestro y se oponía y cuestionaba todo. Yo le decía que estaba en su justo derecho pero que tuviera en cuenta que los demás le iban a hacer lo mismo y así no iba a sacar ningún proyecto en todo su mandato. La idea era regular la oposición y oponerse en donde había cuestiones de fondo, ideológicas, de defensa de ciudadanos. Pero en los otros casos, en donde no hay necesidad de oponerse, no corresponde. Pudimos realizar trabajos muy interesantes con diputados de otras bancadas que coincidían en mejoras para la ciudad. De la misma manera que diputados de otras bancadas me traían proyectos para que yo firme, si el proyecto es interesantes lo firmaba he firmado establecer normas especiales para los clubes de barrio. He firmado proyectos de Ritondo de urbanización de una villa en la zona del Arroyo Cildanéz consulté si la gente que vive ahí estaba de acuerdo. Jamás le voté ningún negocio o utilización y privatización de espacios públicos y créditos. Lo que me valió que cuando terminó mi mandato no fui propuesto para ocupar ningún cargo. Volví a la fábrica en la que trabajaba y punto.   ¿Ahora que no tenes más la banca seguís trabajando en otros proyectos? Nuestro partido tiene la banca de Virginia González Gass, en estos dos años de su gestión voy a trabajar para tratar de canalizar las áreas en donde nosotros habíamos desarrollado más actividad: ambiente, espacio público, inclusión social, defensa de los derechos de los animales, el zoológico. También tengo proyectos presentados que mantienen su vigencia porque duran dos años. Algunos con sanción de primera lectura.   ¿Cuáles son esos proyectos? Uno es la protección de todos los edificios de la planta potabilizadora de AYSA, va a una segunda lectura este año. Tiene un valor histórico, que poca gente conoce. La sede que está en la Lugones tiene todo un barrio de estilo inglés.   ¿Cómo comenzaste a abocarte a lo de protección de los animales? El tema de los animales enjaulados, la exhibición el maltrato, lo tenía incorporado a  mi forma de pensar y cuando llegué a la Legislatura, esperé el momento en el que se terminaba la concesión por veinte años del zoológico, saqué un comunicado: “Se acabó la concesión y el zoológico vuelve a la ciudad.” Ni ellos sabían que se terminaba. Diez días después, el Gobierno de la Ciudad, firmó un nuevo convenio de prórroga de la concesión e iba a hacer una nueva licitación por veinte años. Convocaron a una primera reunión de la comisión de Espacio Público y dijeron que no la iban a hacer por veinte años sino que por cinco para que no pasara por la Legislatura; por ese motivo esa reunión no tenía sentido. Eso terminó en el bochornoso remate de la concesión del zoológico al mejor postor, único caso en el mundo. Me decía Bertonatii (director  de Fundación Vida Silvestre): “Yo voy a reuniones del zoológico del mundo y me preguntan cuánta plata pone el Estado y les digo que no pone plata sino que cobra por una concesión. No lo pueden entender porque en todo el mundo los zoológicos son estatales o están subsidiados, no son un negocio, un comercio.” De manera que a través de toda esta campaña que hicimos para recuperar el zoológico tomé contacto con asociaciones de los derechos de los animales y me interesé por toda esa agenda que está bastante olvidada. Me quieren porque soy el único diputado que los atendió y aprendí mucho de la problemática de los animales callejeros, el comercio de nuevas tecnologías (como el chip que le quieren poner a los perros, que se puede solucionar con chapitas). Presenté dos proyectos, uno es la Comisión de Seguimiento de la construcción del zoológico y que vuelva a la ciudad cuando se acabe la concesión.  Y otro proyecto es sobre la exhibición de animales en comercios. En la actualidad, difícilmente que este gobierno los apruebe pero muchas veces hay que sembrar para cosechar. Quienes están ahora no van a estar eternamente, tienen elecciones en el 2015 y no creo que les vaya fácil renovar el mandato en la ciudad. Si bien es cierto que las ideas sobrepasan a las personas, las personas a veces tienen un papel determinante. Y Macri, consigue reunir distintas corrientes ideológicas que son difíciles de desmontar en un mismo proyecto, es más fácil sumar voluntades cuando tenés el poder que cuando no lo tenes. Allí existen un sector peronista, radicales, michettistas, demócratas progresitas; es un conjunto muy heterogéneo que se nuclea en Macri pero ahora no puede ser reelecto.     ¿A nivel nacional cómo crees que está el país? Me parece que el gobierno de Néstor Kirchner y de Cristina desperdició una oportunidad para que la Argentina iniciara un proceso de desarrollo tal como lo hicieron otros países latinoamericanos. Chile crece, Perú crece, Uruguay crece, Bolivia nos pasa por arriba y para que Argentina hoy tenga, comparativamente, las reservas que hoy tiene Bolivia tendría que tener 70 mil millones de dólares en el Banco Central. Todos crecen y Argentina está en problemas, ha habido un mal manejo de la totalidad de los recursos  energéticos, la venta de los productos  rimario no se volcó a la infraestructura del país, al desarrollo industrial, ferroviario, aeronáutico, naval, de las fuentes de energía. Ahora estamos pagando 12 mil millones de dólares para comprar energía. El mal que tiene este país es el corto placismo. Vienen las elecciones y tratan de generar una burbuja económica,  y después, cuando pasan las elecciones, hay que pagar las fiestas. Eso hicieron en el 2011, retrasan el tipo de cambio todos van a veranear a Cancún, a Cuba, cambian los autos. Así estamos bien, sigamos como estamos. Cuando uno advierte y dice que esto no es así, que estamos gastando plata a cuentas que el dólar no podía estar en 2011 a cinco pesos cuando en el 2002 estaba cuatro. Anclaron el dólar para generar una sensación de bienestar ficticio y ahora lo tienen que llevar a vender, cosa que es inevitable porque la inflación colocó a la economía Argentina fuera de toda competitividad. En lugar de reconocer sus propios errores –la mayoría de los políticos no reconocen sus errores aunque los sepan- empiezan a buscar culpables: que Coto o Carrefour y sacan los precios controlados como si eso alguna vez en la vida hubiese funcionado; cuando vas al supermercado no está.  No está porque es obvio, si uno vende un producto por ejemplo latas de tomate, ponen ese precio controlado si realmente el abastecimiento alcanzara para todas las personas van todos y compran ese. Una empresa tendría que abastecer a todo el mercado pero no tienen forma. Es una cortina de humo, como para que se llene de debate sobre temas que no son de fondo. El tema de fondo es que este gobierno gobernó mal, no tomó las previsiones que tenía que tomar en muchos temas entonces paga las consecuencias y quiere buscar culpables donde no están, complots, las cerealeras, hace diez años que gobiernan ¿No saben que las cerealeras controlan el comercio exterior? ¿Por qué no lo nacionalizaron antes o lo democratizaron para que haya muchas más ofertas? Porque eran aliados de ellos, ahora salen que están reteniendo la cosecha porque no liquidan los dólares.  Nosotros cuando fue la crisis del campo lo planteamos.   ¿Cómo empezaste a interesarte por la política?                  En la escuela secundaria, era muy común que los jóvenes de esa época nos interesáramos porque no entendíamos que pasaba. Estudiábamos instrucción cívica, el  funcionamiento del Congreso, la división de poderes y teníamos un presidente militar. Un día le dije a la profesora de instrucción cívica: Profesora para qué estudiamos todo esto si no existe. Me dijo: Ahora no existe pero esperemos que en el futuro exista. También en esa época otros países latinoamericanos tenían experiencias democráticas interesantes como Salvador Allende en Chile, el Frente Amplio Uruguayo, el gobierno de Torres en Bolivia. Vivíamos en un ambiente muy politizado y con una tendencia al socialismo que después fue frustrada por la represión. Si no hubiese existido la represión salvaje de los ´70s todos los países latinoamericanos hubieran llegado a gobiernos de tipo socialista. A los 19 años me afilié al Partido Socialista de Alfredo Palacios y Alicia Moreau de Justo. Se terminaba una dictadura ­-menos salvaje que la que vino después porque los desaparecidos tenían nombres y apellidos-. Tuvimos el veranito político desde el ´73 al ´75, así participé de lo que fue la reconstrucción de la juventud política argentina desde la clandestinidad.   ¿Cómo fue esa reconstrucción? Después del golpe hicimos la primera reunión en el restaurante “Sibaris”, yo representaba a la Juventud Socialista Autentica. Estaban Patricio Etchegaray  de la Juventud Comunista, Nilda Garré y su hermano Raúl de la Juventud Peronista,  Díaz de la Juventud Intransigente, Demócratas Cristianos, Radicales. Y delineamos el funcionamiento… lo que ocurre es que caminábamos por el filo de la navaja porque no estábamos de acuerdo con la lucha armada, no lo veíamos como una alternativa fiable para la realidad Argentina. Lo que no quiere decir que desconocíamos lo que era un proceso revolucionario pero no existían esas condiciones objetivas y subjetivas, una acción de masas que se propusiera un cambio de sistema. Las acciones armadas eran de grupos pequeños que no tenían inserción en la masa de la sociedad. Nuestra consigna era “Por elecciones libres, sin condicionamientos ni restricciones.”   ¿Eso era caminar por el filo de la navaja? Eso era caminar por el filo de la navaja. Quedabas a merced de que cualquier represor dijera: “Bueno terminemos con estos tipos”. La inmensa mayoría de los desaparecidos no eran los que realizaban lucha armada, porque era una cuestión de criterio de poder, sobre la vida de los demás.   ¿Tuviste alguna situación de peligro en la que creíste que te podían llevar? Tuve varias. Una en Trelew pero antes, en el gobierno constitucional por mi apellido. Me confundían con Alberto Camps, uno de los  sobrevivientes de la masacre de Trelew. Viajaba a Trelew para organizar el partido, cada vez que llegaba al aeropuerto me interrogaban. Después, con la triple A, me cruzaron un auto y me subieron. Pensé que me mataban pero dieron la vuelta y me llevaron a la policía, me detuvieron averiguaron antecedentes y me largaron. Otra vez, fue en el ´78 que había venido una delegación internacional de las Federación Mundial de Juventudes Democráticas Comunista y Socialista, estaban organizando el festival mundial de la juventud en La Habana. Los tipos venían acá, eran un finlandés y un francés y se manejaban como si estuvieran en Finlandia, sin medidas de seguridad y se reunián con partidos políticos. El día que tenían que volver,  junto con un compañero, llevamos al finlandés al aeropuerto. En el camino nos para un auto, se llevaron todo lo que había en el auto, creí que me mataban. A los dos minutos cayó un tipo: ¿Qué les pasó? Deben ser ladrones vengan conmigo a la comisaría y hagan la denuncia por robo. Era para evitar un conflicto internacional. Estaba en pleno mundial de fútbol, ese día jugó Argentina con Polonia que ganó 2 a 0 y nosotros estábamos en la comisaria.   ¿Crees que se cumplieron los ideales que tenías? El hecho de vivir en democracia es muy importante. Los jóvenes no miden lo que es vivir en democracia les parece totalmente natural, no se dan cuenta lo que es vivir en dictadura: que alguien puede disponer de tu vida, de tus bienes que cada vez que tenes que dar una opinión de algo tenes que estar pensando si eso no te va a representar un peligro. Tenes que cuidarte de tus amigos, que si están en organizaciones armadas y un día te juntas con ellos, no sabes si va a caer un operativo y te van a llevar a vos también. Me parece que la democracia ha sido un logro importante, la realidad mundial es otra, se acabó el mundo bipolar, con limitaciones porque los proyectos políticos son mucho más liberados. Hoy gobierna Dilma Rousseff en Brasil que fue guerrillera pero obviamente todo lo del gobierno del PT brasileño no es el que tenía la guerilla. Y lo mismo pasa con Mujica en Uruguay o Bachelet en Chile. De todas maneras, creo que hemos avanzado muchísimo. Las posibilidades hoy están, la alternativa de que alguien de un golpe son mucho más complicadas, los propios países latinoamericano, al que lo quiere hacer lo aíslan, como pasó con Honduras y con Paraguay. Las fuerzas armadas no tienen prácticamente poder para golpear. Cuando yo era joven el nombre de los comandantes del ejército o marina eran tan conocidos como el de los presidentes. Digo que los jóvenes no entienden porque vivíamos así permanentemente, de dictadura en dictadura, en el ´73 dictadura, salimos dos años y otra dictadura más. Eso fue también lo que llevó a muchos jóvenes a la lucha armada porque se cerraban todos los caminos, nadie creía que había otra alternativa que las cosas se podían cambiar a través del voto de la participación.   ¿Tenes amigos desaparecidos? Empezando por mi hermana que murió en el añó ´72. Mi primer novia, Laurita, tiene la placa acá en el Parque de la Memoria, era compañera mía del partido y se fue a la JP y está desaparecida. Compañeros del barrio, de la escuela, dos chicos Degregori, compañeros del Colegio Nacional de Vicente López, mí me habían dicho que estaban desaparecidos y un día en el subte me lo encuentro a uno de los dos: ¿Vos sos Degregori? Me dijeron que estabas desaparecido. Me dijo: No, es mi hermano el que está desaparecido.   Perfil de Adrián Libros: La Biblia (no soy creyente pero siempre la quise leer, es una inquietud cultural) Equipo de futbol: River. Deportes: Correr Redes sociales: Facebook Películas: Me impactó de joven “Lawrence de Arabia” (cuando tuve más conocimiento del personaje cambié de opinión). Frase: “Debe trabajar el hombre / Para ganarse su pan; / pues la miseria en su afán / De perseguir de mil modos / Llama en la puerta de todos / Y entra en la del haragán” (Párrafo del Martín Fierro de José Hernández).