«Parques y Paseos” es el nombre de la obra, escrita y dirigida por Jorge Villegas, con la que el Grupo Zeppelin Teatro llevó a los escenarios cordobeses, el caso de Nora Dalmasso. Con la actuación de Victoria Centeno, la obra “no intenta explicar el caso, no es un trabajo de investigación sobre el crimen. Es un cruce poético sobre las repercusiones mediáticas y las fantasías populares que este hecho luctuoso provocó en nuestra sociedad”, explicaron a Infojus Noticias los miembros del grupo

La pieza teatral es uno de los casos del “Proyecto Judiciales”: cuatro obras sobre “la violencia del capitalismo en las personas”, según lo definió Villegas. “De alguna manera, con esta obra buscamos denunciar, si cabe el término, el modo de vida impune de los nuevos ricos de la política menemista, los testaferros –de lo que se acusó al marido de la víctima- y el fracaso de la investigación judicial y policial”, agregó.

A Nora Dalmasso la encontraron asesinada el domingo 26 de noviembre de 2006,  en su casa del barrio cerrado “Villa Golf”, en la localidad cordobesa de Río Cuarto. Estaba desnuda, boca arriba sobre la cama de su hija, con las piernas abiertas y un cinto de bata alrededor de su cuello.

El de Dalmasso es uno de esos casos en el que todas las versiones quedan en la nada. Primero la Justicia imputó (en febrero de 2007), al pintor Gastón Zárate, como supuesto autor de la violación y el homicidio. También a Carlos Curiotti, un muchacho de origen humilde que durante tres días había estado trabajando como pintor en la casa de la familia Macarrón y, por último, al propio hijo de Nora Dalmasso, Facundo Macarrón, que fue el último de los acusados. El único condenado fue un periodista: Hernán Vaca Narvaja –director de la revista Sur, que cubrió el caso–, a quien la jueza de Río Cuarto, Rita Freire de Barbero, intimó a pagar más de medio millón de pesos en concepto de indemnización por presunto “daño moral” a la familia de la mujer asesinada.

Proyecto Judiciales

Las otras obras que integran el proyecto son: “Cielo cubierto”, que narra el caso de  Marcos Spedale, un adolescente asesinado por una patota en 2005, en El Cerro (Córdoba); “Retrato de un hombre invisible”, que retoma la emblemática y controvertida figura de Charlie Moore, el militante del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) que, promediando la década del ´70, fue capturado por la Triple A y, luego de ser brutalmente torturado, terminó como asesor del aparato represivo argentino; Y “KyS”, por las iniciales de Kosteki y Santillán, los apellidos de Maximiliano y Darío, los jóvenes militantes populares asesinados el 26 de junio de 2002 en el distrito bonaerense de Avellaneda, mientras participaban del intento de bloquear los ingresos al Puente Pueyrredón. Esta última obra será llevada a los escenarios el próximo 26 de junio en la ciudad cordobesa de San Francisco.

Espíritu punk

Villegas contó que trabajar con “lo que pasa” lo tomó de la banda de punk británica The Clash. “Me acuerdo de lo impresionado que quedé una vez que vi una entrevista que le hicieron a Joe Strummer (letrista, cantante y alma de los Clash) en la BBC. Cuando al tipo le preguntan por qué no hacían canciones de amor, él respondió que eso era lo que ya hacía todo el mundo,  y que ellos querían hacer otra cosa: ser una suerte de noticiero, contarle a los pibes qué era lo que estaba pasando en ese mundo que habitaban”.

Tal vez rescatando las palabras que la actriz y docente de la Universidad Nacional de Córdoba, Victoria Varas, expresa en la introducción de Teatro incompleto (el libro publicado por la editorial Recovecos a fines de 2013, que reúne cinco obras de esta dramaturgia que el propio autor denomina como “política” y “militante”), es importante, a la hora de acercarse al teatro de Villegas, tener en cuenta el recorrido realizado por su autor: una combinatoria de lecturas de relevantes intelectuales nacionales y extranjeros, a la vez que largas horas de caminatas, de tránsito por la ciudad. De allí la dramaturgia “insurrecta y plebeya” –según la define Varas– teñida por ese “vértigo revulsivo del punk”.

El dramaturgo cordobés fundó el Grupo Zeppelin Teatro en 1995, en el barrio Alberdi, donde funcionaba un espacio cultural, una escuela y una sala de teatro que llevaban el mismo nombre. Casi dos décadas después, Villegas comenta ante InfoJus que se siente satisfecho con el trabajo que vienen haciendo. Y como para sintetizar el espíritu punk que recorre al grupo remata: “Me interesa un arte donde el espectador se conmueva. Porque si la obra solo entretiene, no hace pensar, no sacude, no sirve”.

Extracto de «Parques y Paseos»

“Gente fina es como una bendición en este mundo. La gente exitosa es como una flor en el jardín de los fracasados. Sí. Adoro los perfumes caros. Las medias caras los calzoncillos caros. Los cuerpos recién salidos de camas solares son bienvenidos wellcome to my jaguar house. Ese modo de estar ocupado del hombre importante me atrae. Ese modo de estar preocupado me atrae. Hay algo que me atrae en esa ropa cara que sólo un grupo de exitosos hombres usan, se parecen, me encantan”.