Un hombre fue a cobrar el alquiler en una de sus propiedades y terminó prendido fuego. El hecho se produjo en una carpintería de la ciudad de Puerto Madryn, y a pesar de que la víctima fue asistida rápidamente por personal médico, se debate entre la vida y la muerte.

Una ambulancia del hospital Isola concurrió al lugar donde el hombre se encontraba en cuclillas siendo abanicado por un vecino para poder ventilarlo y mermar el sufrimiento que las quemaduras produjeron en su anatomía.

Las llamas ocasionaron lesiones severas en el cuerpo del individuo que fue rápidamente trasladado hasta la guardia del nosocomio portuario, donde se corroboró que más del 50 por ciento de su cuerpo fue quemado por el accionar del fuego.

Las razones

Los primeros minutos permitieron inferir que algo extraño sucedió en torno a las quemaduras sufridas porque en el interior de la carpintería no se apreciaba ningún foco ígneo ni humo negro que alertase la presencia de un siniestro. A esto se agregó la prontitud de los servidores públicos para comenzar a guardar las mangueras que se contraponía con la tensión y el enorme despliegue policial circundante en el lugar.

A los pocos minutos las versiones se confirmaron cuando un sujeto de mediana estatura, vistiendo bermudas y con un pañuelo en su cabeza fue retirado detenido por los efectivos policiales. Allí se pudo tener la certeza que el hombre, que había sufrido importantes quemaduras en sus extremidades superiores y rostro, había sido atacado por el ahora detenido. Los motivos de la agresión obedecían a su negativa y malestar porque le quisieron cobrar el alquiler del inmueble donde desarrollaba sus actividades.

Previo a las quemaduras y ante el reclamo de pago habría habido una pelea entre ambas personas que acabó cuando el agresor roció de combustible a la víctima que, primeramente, habría sufrido quemaduras en sus brazos pero en su intento por quitarse las llamas terminó propiciando la proliferación del fuego en su cuerpo.

El hombre permanece internado en el hospital madrynense aunque su estado era crítico y su pronóstico reservado por el alto porcentaje del cuerpo que fue afectado por el accionar del fuego.